La familia Guizado es considerada una de las más poderosas dentro del emporio comercial de Gamarra, en el distrito de La Victoria. Dos de sus integrantes, los hermanos Raúl y Diego Guizado Salinas, son actualmente investigados por la Fiscalía.
La historia de esta familia se escribió desde muchos años atrás. En la década de 1980, los hermanos Pedro y Nemesio Guizado Portillo fueron empleados y vendedores en una tienda de la avenida Aviación. En los 90’ pasaron a convertirse en comerciantes y en dueños de una de las galerías más fructíferas de Gamarra, informó ‘Canal N’.
Nemesio Guizado y sus hijos fueron parte de los empresarios que amasaron una gran fortuna con el auge del emporio comercial. Desde octubre de 1990, la galería Guizado, ubicada en el corazón de Gamarra, acogió a cientos de trabajadores. Ellos luego formaron una red de pequeños talleres y tiendas comerciales.
Posteriormente, llegaron a ser dueños de hoteles de lujo, uno de los cuales está ubicado en Lunahuaná. El boom de la confección en Gamarra permitió que empiecen a invertir en proyectos cada vez más ambiciosos, según ‘Canal N’.
Actualmente, los hermanos Raúl y Diego Guizado Salinas son investigados por su presunta implicancia con la organización criminal llamada ‘Los Patrones de Cánepa’ (vinculada a ‘Los Intocables Ediles’), investigada por los presuntos delitos contra la administración pública en modalidad de colusión agravada.
Según las investigaciones, a Raúl y Diego Guizado Salinas se les entregó en el 2017 unos espacios dentro de Gamarra que debían usarse como baños públicos, pero los convirtieron en locales de comida que alquilaban por S/10 mil. En total, ellos ganaban S/80 mil mensuales, pero solo pagaban S/1.900 al municipio.
Por su parte, el empresario Pedro Guizado Portillo aclaró que ni él ni toda su familia están inmersos en las investigaciones en curso.
“Si bien es cierto que somos un grupo familiar que ha desarrollado su actividad comercial con mucho éxito en Gamarra por mi persona, mi hermano y ahora nuestros hijos; todo el grupo familiar no está incurso en las investigaciones (…) Es muy importante que se identifique y se diferencie a mi persona y a mi familia directa con los hechos materia de investigación”, indicó Guizado Portillo.
“Considero también que debe aclararse que el trabajo y esfuerzo que se inicia en los 60’ así como los resultados y expansión de nuestro trabajo y actividad comercial, no puede soslayarse ni pretender confundirse con hechos ni negocios que mi persona ni mi familia directa han realizado y que, en todo caso, serán objeto de investigación contra los responsables si los hubiere”, agregó.
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