John Jairo Velásquez, alias 'Popeye', exjefe de los sicarios de Pablo Escobar estaría con un pie dentro de prisión luego de ser encontrado en la celebración del cumpleaños número 50 de uno de los más poderosos capos de la droga de Colombia y Estados Unidos y que hace unos días fue capturado en un exitoso operativo para capturarlo.
Según informan las autoridades colombianas, Juan Carlos Mesa, 'Tom', era uno de los narcotraficantes más buscados por el país cafetero y por el que Estados Unidos ofrecía una recompensa de dos millones de dólares por su captura.
Juan Carlos Mesa fue capturado en el instante en que celebraba sus 50 años en compañía de varias mujeres, entre ellas dos menores de edad, y de John Jairo Velásquez, 'Popeye', ex lugarteniente y asesino de Pablo Escobar.
La captura se produjo en una lujosa hacienda en Antioquía, donde las autoridades hallaron decenas de armas, más de 30 millones de dólares, joyas de oro y diamantes. Juan Carlos Mesa era el jefe de la oficina de Envigado, uno de los principales grupos de narcos de Colombia que se apoderó de Medellín tras la muerte de Pablo Escobar.
Según los datos oficiales, Juan Carlos Mesa delinquía desde 1988 y estaba desde 2014 en la Lista Clinton de personas o empresas vinculadas con el narcotráfico.
¿POPEYE A PRISIÓN?
La captura del narco Juan Carlos Mesa podría afectar la libertad condicional de Jhon Jairo Velásquez, 'Popeye', ya que al ser hallado en la fiesta de un narcotraficante, las autoridades podrían revocarle dicho acuerdo y volvería a prisión para cumplir el resto de su condena.
Según un comunicado de la Fiscalía, "Popeye" incumplió los compromisos adquiridos en el momento de firmar el acta de libertad condicional al acompañar a "Tom", por quien la justicia de Estados Unidos ofrecía una recompensa de 2 millones de dólares y contra quien pesaba una orden de captura.
Para la Fiscalía colombiana, la actuación de Jhon Jairo Velásquez Vásquez, Popeye, "es un hecho de altísima gravedad que afectaría el beneficio otorgado".
"Popeye" estuvo más de 23 años en la cárcel y ha manifestado en diversas entrevistas que se reintegró a la sociedad.
Sin embargo, 'Popeye', a través de su cuenta en Twitter, se defendió y sostuvo que "me encontraba en el lugar equivocado". "Estaba en una fiesta y pasó lo qué pasó. No es delito ir a una fiesta. Por eso me liberaron”.
“Estuve bajo operativo policial. Me trataron con respeto. Lo mismo que a las mujeres y los niños. Y las mascotas. Allí habían familias. Era una fiesta de cumpleaños. En un hotel. Yo estaba en el hotel. En el lugar equivocado", dijo 'Popeye'.
Por otro lado, Popeye envió un mensaje a la Fiscalía en el que anunció que no colaborará con el ente acusador. “Olvídense de mí para todos los casos del cartel de Medellín. Busquen otro que les ayude, hasta acá llego yo", se puede leer en la popular red social.