Snooty, al que el libro Guinness de los récords reconoce como el manatí en cautividad más longevo del mundo, murió dos días después de celebrar su cumpleaños número 69 en el acuario de Brandenton, ubicado en la periferia de Tampa, en Florida (Estados Unidos), donde vivió desde 1949.
El Museo del Sur de Florida calificó en Facebook como “un desgarrador accidente” la muerte de Snooty y las circunstancias del hecho ya son materia de investigación. Asimismo, informaron que sus otros manatíes en rehabilitación –Randall, Gale y Baca– se encuentran en perfecto estado.
Snooty fue hallado bajo en un área submarina usada únicamente como acceso a la plomería del sistema de soporte vital de su exhibición. Las primeras informaciones señalan que el panel de una puerta de acceso que por lo general está atornillada estaba suelta por algún motivo y el manatí ingresó nadando hasta allí.
El hábitat de Snooty es sometido a una rigurosa inspección visual diaria y no hubo indicadores el día anterior de que algo malo ocurriese, precisó el Museo del Sur de Florida. El acuario permanecerá cerrado mientras el personal a cargo continúa con las pesquisas del caso.
Snooty nació en cautiverio y es totalmente dependiente de los humanos, por lo que no podía ser dejado libre en la naturaleza. Sus cuidadores señalaron que su longevidad se debió probablemente a que vivía en un sitio donde la temperatura está controlada y a que existen pocas amenazas a su alrededor.
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