El dictador del Corea del Norte, Kim Jong-un, lanzó el último domingo un nuevo misil, el ‘Hwasong 12’, y las alarmas se encendieron en Corea del Sur, Japón y Estados Unidos, que temen ser atacados con armas nucleares, dadas las amenazas de Pyongyang.
El nuevo misil, calificado por Corea del Norte como ‘un nuevo cohete balístico tierra a tierra de largo alcance, capaz de llevar una ojiva nuclear’, ha provocado temor, pues viajó 787 kilómetros y llegó a una altura máxima de 2 111 kilómetros.
Según los expertos, ello indicaría que el referido misil de Corea del Norte podría tener un alcance de 4 500 kilómetros.
Es el cohete de Corea del Norte que ha llegado más alto y lejos que cualquier intento anterior. Kim Jong-un se mostró eufórico y advirtió que su país ahora sí es capaz de alcanzar territorio continental de Estados Unidos y bases de ese país en Asia y el Pacífico.
La prueba estaba destinada a examinar ‘los detalles técnicos y las características’ de un nuevo tipo de cohete, ‘capaz de transportar una carga nuclear grande y poderosa’, aseguró la agencia oficial KCNA.
El ingeniero aeroespacial John Schilling, citado por el sitio especializado 38 North, estimó que el cohete de Corea del Norte sería de la categoría intermedia de misil balístico, ‘capaz de atacar certeramente a la base norteamericana de Guam’ en el Pacífico.
“Representa un avance sustancial hacia el desarrollo de un misil balístico intercontinental (ICBM)”, agregó.
CONDENA
El lunes, un día después del lanzamiento de Corea del Norte, varios países, incluido el Perú, condenaron la prueba por constituir ‘una grave amenaza a la paz y seguridad internacional’. Estados Unidos y Japón pidieron convocar una reunión de urgencia del Consejo de Seguridad de la ONU.
Desde el año pasado, Corea del Norte ha realizado dos tests nucleares y decenas de pruebas de misiles balísticos, en su intento de desarrollar armamento capaz de alcanzar el territorio continental de Estados Unidos.