Peligro de guerra. Estados Unidos realizó una prueba militar sin precedentes para comprobar su capacidad de interceptar los misiles balísticos de Corea del Norte, en el océano Pacífico. El proyectil fue lanzado de la base de pruebas ‘Ronald Reagan’ del atolón Kwajalein, en las Islas Marshall.
Según el informe del Departamento de Defensa, un radar en el mar localizó el objetivo y siguió su trayectoria hasta permitir su destrucción.
De otro lado, la agencia estatal de Corea del Norte de noticias KCNA indicó que dos bombarderos americanos B-1B despegaron de la isla de Guam y llegaron a aproximarse a unos 80 kilómetros de la ciudad surcoreana de Gangneung, cerca de la frontera con el Norte, donde se ensayó ‘un bombardeo’.
En respuesta a estas maniobras, el líder de Corea del Norte, Kim Jong-un, calificó el hecho como una “pataleta imprudente que sitúa a la península coreana al borde de la guerra”. Además, amenazó con mandar ‘un regalo más grande a los yanquis’. Se trataría de una bomba atómica de mayor alcance que las ya lanzadas y que cruzaría el océano Pacífico hasta llegar a EE.UU.
A su vez, China y Japón acordaron ‘unir fuerzas’ para hacerle frente a Corea del Norte.
TEN EN CUENTA
El 21 de mayo, Corea del Norte lanzó el misil balístico de alcance medio Pukguksong-2, que recorrió 500 kilómetros y cayó en el mar del Japón.
En respuesta, Estados Unidos envió a la región del Pacífico un tercer grupo de combate, encabezado por un portaaviones.
En más de 5 años en el poder en Corea del Norte, Kim Jong-un ha superado en más del doble de las pruebas de misiles balísticos realizadas por su padre y predecesor, Kim Jong-il (1994-2011).
Kim Jong-un es nieto de Kim Il Sun, quien gobernó Corea del Norte desde 1948 hasta su muerte, en 1994.