Mientras Carlos Hualpa Vacas (36) sabe que su único destino es la cárcel, su víctima Eyvi Ágreda continúa hospitalizada sin reaccionar y con el 60 % del cuerpo quemado. Ayer le realizaron la tercera de las diez intervenciones quirúrgicas que necesita para empezar a recuperarse.
Su hermana Sandra Ágreda, quien pidió que caiga ‘todo el peso de la ley sobre el agresor’, informó: “Se le ha practicado un lavado más profundo. Ella se encuentra inconsciente, sedada. No ha hablado, no abre los ojos”.
Indicó que el estado de salud de Eyvi es delicado, pese a los cuidados de los médicos del hospital Guillermo Almenara.
“Ese sujeto truncó los sueños de mi hermana porque nunca le hizo caso. Mi hermana trabajaba y estaba a un año de terminar la carrera de Negocios Internacionales”, precisó Sandra.
“Hacemos un llamado a todas las víctima del bus, al conductor mismo, a los pasajeros, que son numerosos, para que denuncien al criminal de forma individual por los delitos de lesiones graves, delito contra los medios de transporte, delitos de daños materiales en forma agravada, delito de exposición de personas al peligro”, imploró Sandra Ágreda.
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