Miguel Ortiz siempre tuvo espíritu emprendedor. Recuerda que de niño vendía de todo, pan, manzanas dulces, figuritas… En 1994 empezó a vender celulares y fue tanto el éxito que logró abrir su primera agencia en la avenida Arequipa. Hoy tiene ocho puntos de ventas y distribuye en todo el Perú.
Tengo entendido que empezó vendiendo celulares para BellSouth, que caminaba mucho y a veces no tenía ni para almorzar, ¿cómo así surge la idea del negocio propio?
Yo vendía celulares, recuerdo que me fui a comprar unos estuches bonitos y se los ofrecí a mis conocidos que tenía en el Banco de la Nación, les gustó y me compraron. Hice más de 170 ventas en tres días y hasta mis jefes me ayudaron a llenar los contratos. Como vi que lo mío eran las ventas, decidí abrir mi propia agencia.
¿Por qué ‘La Esquina del Prepago’?
Me traje de Estados Unidos un lote de teléfonos prepagos y puse publicidad en ‘Radiomar’ donde regalaban a los oyentes, y fue ahí donde nació mi empresa, y el 2003 patenté el nombre.
¿De quién heredó ese espíritu emprendedor?
De mi madre, ella vendía sábanas, ropa, relojes.
¿Cómo se dio cuenta que había un ‘nicho’ para sus productos?
Muchos se fijaban en los segmentos A y B, pero nadie se percató que el sector C también necesitaba este tipo de productos, me enfoqué en ellos. Además, yo fui el primero en traer celulares de fábricas chinas y hacer mi propia marca.
¿Dónde abrió su primer local?
En la avenida Arequipa 2408, empecé en el año 2000 justo con BellSouth y vendía post pagos.
¿Es verdad que se prestó dinero para poder iniciar este negocio?
Sí, porque no tenía carta fianza, el operador me pedía 20 mil dólares para que me den los equipos, me pedí prestado 12 mil dólares y el resto era de mis ahorros.
¿Qué tan duro fueron sus inicios?
No fue tan duro en realidad, porque ya conocía el negocio. Comenzamos a vender post pagos y las campañas eran muy buenas y se ganaba bien.
En todos estos años, usted ha puesto varios módulos, ¿qué es lo más importante para que un negocio marche bien?
Darles calidad y variedad a los clientes, conocer el producto y estar metido en el negocio.
¿Qué características tienen los productos que ustedes venden?
Tenemos servicio técnico propio y les damos un año de garantía.
¿Cómo atrae al cliente?
Nuestras ventas son receptivas en centros comerciales (consideradas ‘zonas calientes’), distribuyo mis teléfonos a todo el Perú. Soy un canal mixto: mayorista y retail.
Usted ha mencionado que son los primeros en importar celulares, ¿son productos de buena calidad?
Por supuesto, los compro con garantía y con repuestos.
¿Por qué tendrían que elegir un producto de ‘La Esquina del Prepago’?
Porque son buenos productos y, si alguno tiene una falla, se los cambio.
¿Cuántos puntos de venta tiene en Lima?
8 puntos de venta.
¿Cuáles son sus planes a futuro?
Tener cien puntos de venta, estoy negociando con un operador.
Esta es una empresa formal, ¿paga sus impuestos?
En estos 16 años, World Line ha facturado más de 100 millones de soles. Nuestras ventas crecieron al 61% a comparación con el 2014, y este año pensamos facturar entre 15 a 17 millones.
¿Empezó solo o con socios?
Solo.
Siempre se comenta que los emprendedores ven oportunidades cuando hay crisis, ¿ustedes qué ven en estos momentos?
Me va bien, puse mi propio restaurante justo en tiempo de crisis. Es difícil hacer empresa en el Perú, yo, por ejemplo, traía celulares repotenciados y solo dormía tres horitas, porque quería ver que los equipos estén bien.
¿Qué planes tiene para los próximos años?
Tengo restaurante y pienso hacer dos edificios, uno para oficinas y el otro para departamentos.
¿Qué consejos les daría a los jóvenes que quieren iniciar un negocio?
Muchos quieren hacer negocios para ganar, pero tienen que saber que tendrán muchos raspones para cruzar más allá, lo importante es que tengan voluntad y lo hagan, que cumplan sus sueños que cuando crucen todo se sentirán bien. Investiguen el mercado, analicen el mercado, es lo vital para su negocio.
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