Antony, un hombre del Reino Unido se llevó una de las sorpresas más duras de su vida tras enterarse, por mera casualidad, que su esposa Ruth Forth fue la artífice del robo de dinero a una mujer en silla de ruedas. Él, molesto e indignado, decidió denunciarla ante las autoridades. Esta historia no tardó mucho para darse a conocer en las redes sociales y con ello convertirse en tendencia.
Una confesión mientras dormía
Todo sucedió en horas de la noche, cuando el sujeto se encontraba durmiendo. De pronto, despierta, momento en el cual escuchó a la mujer de 47 años hablar dormida relatando que hurtó 7 mil 200 libras esterlinas (moneda del Reino Unido) a la persona antes mencionada, quien era su responsabilidad cuidar en un albergue para ancianos.
Y es que el padre de tres hijos comenzó a sospechar de Ruth cuando esta, de la noche a la mañana, comenzó a gastar miles de dólares en medio de unas vacaciones familiares en México; las mismas que serían confirmadas cuando, entre murmullos, la escuchó hablando sobre su delito.
La confirmación de las sospechas
Pero, no pasó mucho para que Antony encontrara una evidencia que ratificaba las palabras de su esposa: la tarjera de débito de la persona que estaba a su cuidado, la cual encontró en su bolso, tras lo cual tomó la difícil, pero necesaria decisión de acudir a la policía.
“Ruth estaba murmurando sobre dinero y cuando me desperté, vi el bolso en el suelo con algunos billetes caídos. Me levanté para devolverlos y dentro de su bolso vi la tarjeta de débito”, contó Antony a Daily Mail,
“Me sentí absolutamente asqueado. No podía creerlo. Cuando Ruth se despertó la encaré y admitió todo. Le dije que hiciera las maletas y se fuera. Fue desgarrador, la amaba y, sin embargo, sabía que no tenía más remedio que denunciarla”, agregó.
Denunciada y enjuiciada
El microbiólogo de 61 años expresó tras conocerse el hecho: “Tenía mis sospechas cuando Ruth comenzó a gastar en exceso. Al principio era más un instinto, pero cuando encontré la tarjeta de débito en su bolso, lo supe. Fue una rotura de corazón. Amaba profundamente a Ruth, pero no podía ignorar lo que había hecho. Me resultaba abominable que pudiera robarle a una persona vulnerable y tuve que denunciarla”.
Tras hacer la respectiva denuncia a las autoridades, Ruth Forth fue arrestada, para luego ir al Tribunal de la Corona el pasado febrero de 2021 donde reconoció haber robado los 7 mil 200 libras a la mujer que cuidó por un periodo de 2 meses, recibiendo una sentencia de 16 meses de prisión suspendida, así como asistir de forma obligatoria a sesiones de rehabilitación de drogas.
Incumpliendo su condena
Pero, Ruth volvería a dar de qué hablar cuando violó las imposiciones dadas por la corte cuando violó la sentencia de prisión suspendida y no asistir a dos sesiones de rehabilitación, así como también perderse una reunión con su oficial de libertad condicional, por lo que volvería a comparecer ante el Tribunal, donde el juez le dio una última oportunidad, pero imponiéndole toque de queda de 7 de la noche a 7 de la mañana.
El comienzo de las dudas
De hecho, Antony detalló cuál fue el punto de inicio de sus sospechas respecto a su esposa: “Una noche de agosto de 2018, recogí a Ruth del trabajo y me dijo que había llevado de compras a uno de los residentes del hogar de ancianos ese día. Dijo que la señora que estaba en silla de ruedas tenía 98 mil dólares en el banco. Algo en la forma que habló hizo que mi corazón se hundiera. Me di cuenta que Ruth debía tener acceso a la tarjeta y al número de PIN. Comencé a preocuparme. No tenía motivos para ello, pero fue un instinto”.
La pareja se casó en 2010 y tuvieron años de mucha felicidad, pero para el 2018 Antony sospechaba de su esposa por este tipo de comportamientos, sobre todo cuando se fueron de viaje a México donde Ruth gastó más dinero de lo debido, pero cuando este le preguntó de dónde sacaba dichas cantidades, ella aseguró que sus familiares le dieron mil libras.
Quiere ayudar a su esposa
“No estaba seguro si creerle”, aseveró el hombre, quien hoy también afirma que, a pesar de sentir que hizo lo correcto, se siente señalado en su comunidad: “Hice lo debido y, sin embargo, estaba siendo juzgado junto con Ruth (…) mi ira ha disminuido ahora y quiero ayudarla. Siento que el sistema nos ha fallado hasta ahora”, sentenció.