Los perros George y Blake fueron compañeros durante 12 años. Blake falleció producto de un accidente y George entró en una depresión profunda. Todos las ganas que tenía que vivir se fueron con su fin amigo perruno. La historia fue publicada por la dueña del perro en Facebook.
Los especialistas afirman que los perros puedes sentir depresión de la misma manera que los seres humanos. George es el claro ejemplo de esta hipótesis.
La terrible depresión que sufría George era tal que dejó de comer y jugar. La dueña del can reveló que el buen perro casi fallece dos veces. Un buen día, la ayuda llegó para el adolorido perro.
Jacquie Litton, dueña de George, contó que un buen día apareció un pato salvaje en su jardín y comenzó a seguir al can por todas partes. Todo sacaba de cuadro a la dueña de George, el pato seguía al perro a todas partes.
Al principio George no le hacía mucho caso hasta que, poco a poco terminó aceptando su amistad. Desde ese momento son amigos inseparables.
Jacquie Litton se dio cuenta de la nueva amistad de George y decidió "adoptar" también al pato y lo bautizó como Donald. La tremenda historia fue compartida en Facebook por millones de usuarios.