En medio del conflicto bélico que hoy viven Ucrania y Rusia, el sufrimiento de los civiles es inmenso, donde no pocos tienen lazos familiares en estas dos naciones, tal y como fue el caso de una pareja ruso-ucraniana quienes se han vuelto en un símbolo de paz y unidad tras ser captados juntos envueltos en banderas de ambos países, y cuya historia no tardó mucho para convertirse en tendencia de las redes sociales.
Desde el inicio de las hostilidades que datan del pasado jueves 24 de febrero, la imagen de un hombre envuelto en la bandera ucraniana abrazando a una mujer cubierta por la bandera rusa ha circulado por todo Internet dando mucho de qué hablar y con miles de personas que están interesadas en conocer la historia detrás.
Un símbolo de hermandad
La imagen no es reciente, data del 2019, donde los protagonistas son Juliana Kuznetsova oriunda de Rusia al lado de su novio nativo de Ucrania, siendo compartida en dicho momento por la propia joven en su cuenta de Instagram tras asistir a un concierto de Max Korzh, un rapero de Bielorrusia que, en dicho momento, dio un concierto en Varsovia, capital de Polonia.
A The Washington Post, Juliana reveló que cogieron las banderas prestadas y pidieron a los fotógrafos en el local que les sacarán algunas tomas, las cuales compartió, se hicieron en su momento viral y revivieron a razón del conflicto Rusia-Ucrania.
Al mismo diario, la joven rusa aseguró que nada de ello fue planeado: “No teníamos intenciones políticas con esta fotografía. Pero, cuando la foto se difundió por Internet, me di cuenta que, tal vez, esa foto dé esperanza a la gente, la creencia que todo puede estar bien pase lo que pase. El amor puede vencer cualquier cosa”.
Reprimen protestas antiguerra en Rusia
En este contexto, no pocas personas en Rusia han salido a las calles a protestar para mostrar su descontento por las acciones de Vladimir Putin por invadir a su vecina Ucrania; sin embargo, la respuesta de Moscú ha sido la de arrestar a más de mil personas en San Petersburgo.
En la capital rusa, manifestantes se congregaron en la Plaza Pushkin gritando en coro: “¡No a la guerra!”, slogan que también fue pintado en la puerta de entrada a la cámara baja del Parlamento.