Mi amigo, el fotógrafo Gary, no pierde la energía ni el buen ánimo. Pese a que los horarios de su trabajo en el diario son complicados, me cuenta que siempre se da tiempo para estar con su familia y dormir a sus horas. Ahora que se habla mucho de la salud y obesidad, me estuvo contando que también se da tiempo para hacer ejercicios al levantarse. “María, es muy importante llevar una vida sana para llegar a la vejez en las mejores condiciones. Pero así como es importante la parte física, igualmente lo es el aspecto espiritual. Ambos se complementan para alcanzar la felicidad. A continuación, algunos consejos de los expertos para el alma:
- Evita las relaciones tóxicas. Pon límites a los que manipulan, exigen siempre más, te quitan espacio y te coaccionan. Pueden ser la pareja, un familiar, amigo o compañero del trabajo. No permitas que te dañen.
- Hay que ser positivos: Cultiva el buen humor, la sonrisa, para mantener la esperanza. Las personas negativas reciben cosas negativas.
- Demuestra amor a los tuyos. Muchas veces olvidamos la importancia de dar amor. Abraza a tus hijos, a tu pareja, a tus padres y diles que los amas y lo importantes que son en tu vida. Hazlo siempre, como si fuera el último día de tu vida. Así, tú también recibirás amor.
- Controla tus emociones. No permitas que la cólera te domine. Tampoco que las penas, angustias y preocupaciones te afecten más de lo necesario. Todos pasamos por épocas malas y hay que aprender a superarlas. Las personas más maduras, emocionalmente, son más exitosas en todo sentido.
A su vez, resaltan la importancia de dormir bien:
- Menos arrugas. La piel se renueva mejor durante la noche. Por eso existen cremas específicas de acción nocturna.
- Mantiene sano el corazón. Se calcula que quienes duermen poco tienen tres veces más riesgo de padecer una insuficiencia cardiaca. Además, el insomnio aumenta los niveles en sangre de las hormonas del estrés, lo que aumenta la tensión arterial y la frecuencia cardiaca.
- Te mantiene más sano. Durante el sueño, el sistema inmunitario se regenera, con lo que podrá luchar de forma eficiente contra toxinas y gérmenes.
- Mejora la memoria. Cuando se duerme se fortalecen las conexiones neuronales. Durante la fase REM del sueño, el hipocampo, el almacén de nuestra memoria, se restaura, transformando la memoria a corto plazo en memoria a largo plazo.
- Aumenta la creatividad. Si el cerebro está bien descansado y la producción de hormonas es equilibrada, la memoria será óptima. De esa forma, nuestra imaginación aumentará y seremos más creativos”. Gary tiene razón. Me voy, cuídense.