
Mi amigo, el fotógrafo Gary, llegó al restaurante por un rico tallarín saltado de pollo. Para tomar pidió una jarrita con hierbaluisa. “María, de a pocos, la inteligencia artificial se está apoderando de muchas de las actividades humanas, en muchos casos haciéndonos la vida más fácil. Sin embargo, como ocurre con todas las cosas, hay partes buenas y partes malas.
Mientras con la IA podemos mejorar la comunicación, agilizar trámites o atender pacientes en hospitales, también nos pueden estafar o robar. Hace poco, delincuentes usaron inteligencia artificial para hacerse pasar por el actor George Clooney, a fin de robar 15 mil dólares a una mujer incauta.
La operación incluyó una supuesta comunicación por chat con el actor y su mánager, para que la estafada compre una supuesta tarjeta de membresía de su club de fans. En el Perú ya se sabe que las mafias están estafando a ancianos y jubilados con supuestas bonificaciones del seguro o premios en efectivo de programas de televisión. Les dicen que para acceder al dinero deben primero pagar un impuesto que tienen que depositar en una cuenta. Otras veces, con ayuda de la IA, fingen la voz de un hijo o nieto en problemas con la Policía y así logran sacarles miles de soles.
Hay ciberdelincuentes más tecnológicos que hasta clonan o sacan tarjetas de crédito de sus víctimas con el fin de pedir préstamos o hacer innumerables compras, sin que estas se enteren. Aquí algunos consejos:
- No abra correos extraños. Si son de su banco o alguna institución, verifique que el dominio sea el correcto.
- Desconfíe de la solicitud de información personal o acciones urgentes: Las entidades legítimas no solicitan información sensible ni acciones urgentes como descargar archivos adjuntos o hacer clic en enlaces.
-Si le piden con urgencia la cancelación de cuentas bancarias o la detección de actividades sospechosas, evalúe estos mensajes con detenimiento.
- No abran en WhatsApp o correos enlaces desconocidos o sospechosos. Van a utilizar sus datos para robos.
- Atento al reporte de sus movimientos bancarios”. Gary tiene razón. Me voy, cuídense.