Este Búho conoce muy bien lo que es participar en jornadas de protesta por una causa justa. Ingreso al túnel del tiempo. Corría el convulsionado año 1979, había una represiva dictadura militar de Morales Bermúdez y, como ‘cachimbo’ sanmarquino, apoyábamos la huelga de los maestros y exigíamos el retorno a la democracia. Esas eran unas causas justas. Los jóvenes no medíamos el peligro, había que pensarlo dos veces para salir a las calles.
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Cuando colocábamos ‘miguelitos’ en la avenida Venezuela, aparecieron las tanquetas de los infantes de Marina. Los uniformados se bajaron y sin miramientos nos comenzaron a disparar. Partimos en estampida y uno de los más antiguos me gritaba ‘chibolo, corre en zig zag, corre en zig zag’, y claramente sentía como las balas silbaban por mis oídos. Hubo muchos mártires en esas heroicas jornadas de protesta legítima. Hoy me sorprendo de ver que los más beligerantes y agresivos lo hacen defendiendo a un presidente ladrón y todavía golpista como Pedro Castillo.
Pero lo que nunca, jamás, se hizo en esas épocas fue atacar brutalmente a los equipos de prensa
pese a que en ese entonces los medios estaban confiscados. Nada justifica el ataque a los colegas de America Televisión, Panamericana o Willax. O las amenazas a Latina. Veíamos su desprecio por la libertad de expresión. Estos eran los cabecillas. Se nos escarapeló el cuerpo al pensar que estos ‘pitecantropus’, egresados con honores de esa escuela del odio llamada ‘Consejo de Ministros Descentralizado’, que dirigía el demoníaco Aníbal Torres, puedan instaurar una ‘Asamblea Constituyente’ donde enfilarán su odio contra la libertad de prensa y contra las empresas periodísticas, como sucedió en la Venezuela chavista. Están totalmente equivocados aquellos que creen que ‘si no renuncia Dina esto se va a poner peor’. El objetivo Dina de los radicales es solo el primero. Tienen más exigencias inaceptables y van a ir por más. Así se vaya seguirán con sus asonadas.
No se puede negar que han llegado miles de pobladores surandinos a protestar porque votaron por Castillo y les han contado una narrativa equivocada. Pero los azuzadores tienen como estrategia la destrucción, el caos, el terror. No entiendo cómo salen voces que se dicen conocedoras del derecho y pueden ponerse en el plan ‘el fin justifica los medios’ y ponerse a ‘interpretar’ sus intenciones. Quieren que renuncie Dina y se cambie la mesa directiva del Congreso para ir a nuevas elecciones. ¿No serán esos los deseos de la izquierda de taberna, de cafetín, que buscan repetir el plato como lo hicieron con Sagasti? Cuidado que se pueden quemar.
Están jugando con fuego. La realidad está demostrando que esta asonada está muy bien organizada. Empezó el miércoles con bloqueos a la Panamericana en Virú, lo que costó, por este inhumano cierre, la muerte de una pasajera enferma y del bebé de una madre gestante. Y el bárbaro ataque a una comisaría y el incendio de la sede del Poder Judicial en Carabaya, al mismo estilo senderista. Pero ojo, ese incendio dejó en cenizas decenas de expedientes de juicios por narcotráfico. Ayer, como lo habíamos adelantado, demostraron que tenían un plan oculto. Organizaron tres coordinadas tomas de aeropuertos.
En Arequipa lograron ingresar para destruir una antena y torres en la pista de aterrizaje. Definitivamente barbarie y destrucción con incendio de edificios en Lima y agresiones a la Policía. Qué triste papel de la izquierda que justificaba la ‘Toma de Lima’ como una ‘jornada de protesta legítima’. Le hacen el juego a los que buscan imponer el terror. Mis respetos a la Policía Nacional del Perú. Apago el televisor.
