Del saque somos carnecita... No se lleven de una cara bonita, blanquita, ni un cuerpito o cuerpote. Lo que vale es el sentimiento, la lealtad, decencia, dignidad y punto. Nada que los tiempos han cambiado ni ‘lo que no fue en tu año no te hace daño’ y ahora la gente es ‘mente abierta’. Esas son estupideces. Hay un pelotero con fama de mujeriego que hace algunos años se pegó y templó de una cantante cuyo refrán de cabecera es: ‘Lo vivido y gozado nadie te lo quita’. La chica escuchó la propuesta y salió arrancada. Lo sacudió con fuerza porque ella solo estaba jugando naipes. El ‘man’ tuvo suerte porque se iba a ‘soplar’ un ‘show’. Vivo, recorrido o ganador es el que escoge bien y no se ciega. Sí, señores...
Ese ‘Pitbull’ de la franja se computa peleador de ‘Vale todo’. Que le baje dos rayitas a su carácter. Los ‘padrinos’ ya no existen. Solo Don Corleone se fue al techo por un paro cardiaco. El resto ha tenido problemas serios. Cobraron o no la contaron. El zaguero se comió un pleito en la cancha y lo reventó al ‘Gavilán’ y ‘Potoncito’ el sábado por la noche. Todo lo ve puñete. Tranquilo, que hoy uno no sabe cómo reaccionan los ‘tira piedras’ o sanos. Lo mejor es jugar y, si quieres, hazte sentir, nada de violencia. Rexuxa...
Hay un entrenador que cree que con una llamada por teléfono va a atarantar y no se le va a poner lo que me entero. Dizque por segunda vez se ha portado mal con un colaborador. Cuentan que lo cerró a su asistente y preparador físico con la liquidación de un club del norte. No lo digo yo, ellos mismos se han quejado y soltado la bola. A fines del año pasado llevó a un ‘second’ a otro equipo y este año lo arrimó por un argentino. Están en su derecho de tomar esa decisión, pero no la forma como le comunicaron la noticia al ayudante. No le dio la ‘pepa’ y mandó al jefe de equipo. Así no es...
Es increíble lo que pasa en nuestra pelotita. Los técnicos de menores son maltratados porque les tiran limosnas de sueldo. Algunos ganan mil soles, otros dos por dirigir una categoría y lo penoso es que cobran en partes y ni siquiera les cancelan todo el año. Pero vienen ‘turroneros’ desconocidos y les abren la chequera. Hay un argentino que dirige una reserva y que es tan ‘cara de palo’ que pidió carro y depa para todo su staff de trabajo. La gente de Muni lo mandó a la mela. Pero tiene tanta suerte que su padrino le consiguió equipo en el norte. Estamos todos locos... Me voy, soy fuga.
Contenido GEC