La ambición de dos cazadores los llevó a una muerte segura cuando furtivamente ingresaron a una reserva natural para cazar rinocerontes en peligros de extinción. Los hombres no se percataron que en ese lugar habitaban leones y estos los despedazaron mientras esperaban a los otros animales.
El hecho se registró en la reserva de Sibuya, en el sureste de Sudáfrica. El dueño del espacio natural, Nick Fox, informó que los vigilantes de la zona descubrieron los restos de estos cazadores en el área poblada por leones.
"A juzgar por los zapatos y objetos hallados en la zona, sospecho que dos o quizás tres (cazadores furtivos) murieron. Los restos estaban esparcidos en una área muy amplia, lo que dificulta el rastreo en el lugar y la recopilación de todas las pruebas", declaró el propietario de la zona.
Los intrusos habrían perpetrado en la reserva natural de Sibuya entre la noche del domingo pasado y la madrugada del lunes, sin percatarse que estaban en un lugar altamente peligroso por ser área de leones salvajes.
"Iban armados, entre otras cosas, con un potente rifle con un silenciador, un hacha, cortadores de cable, y tenían comida para varios días: todas las marcas de una banda intentado matar rinocerontes para extraer los cuernos", sostuvo Fox, quien además indicó que nada de esto les sirvió para salvar sus vidas.
Los restos de los cazadores fueron recogidos y enviados a expertos forenses, así como la citada arma de fuego para averiguar si se ha usado en actividades de caza ilegal o crímenes.
Los rinocerontes en Sudáfrica son algunos de los animales más codiciados por todos los cazadores, pues en el mercado de negro los cuernos y la piel son muy codiciados por coleccionistas. Actualmente, en este país se concentra el 80 por ciento de la población total de estos animales en África.
Los productos elaborados a base de cuerno de rinoceronte son muy populares en China y Vietnam, donde esta materia prima se asocia al éxito social y se le atribuyen propiedades curativas y afrodisíacas.