Una mujer de 52 años fue asesinada y tragada entera por una pitón en la provincia de Jambi, en Indonesia, según informan medios locales.
La víctima de esta trágica e insólita muerte ha sido identificada como Jahrah, una recolectora de caucho que se dirigía a trabajar en una plantación el domingo en la mañana, apunta la BBC.
Horas más tarde el esposo encontró ropas y las herramientas de trabajo que Jahrah usaba en la plantación de caucho.
La noche del domingo denunció su desaparición y grupos de búsqueda se organizaron para encontrarla. Recién un día después unos aldeanos encontraron una enorme pitón con un gran estómago y comenzaron a sospechar.
Se trataba de una serpiente de 5 metros de largo. Los aldeanos la atraparon, la mataron, la cortaron y dentro encontraron el cuerpo sin vida de la mujer, casi intacto.
“La víctima fue encontrada en el estómago de la serpiente”, dijo el jefe de policía de Betara Jambi, AKP S Harefa.
Si bien este tipo de muertes donde una serpiente se come a una persona son muy raros, ha ocurrido antes en Indonesia: dos veces, en 2017 y 2018.
Hasta ahora, la serpiente que se traga a los humanos, en Indonesia, es del mismo tipo, la pitón reticulada (Python reticulatus), según Herna Hadi Prasetyo, de la agencia de manejo de serpientes, Sioux Indonesia.
Según informa la BBC, las pitones se suelen tragar la comida entera y sus mandíbulas están conectadas por ligamentos muy flexibles que les permite estirarse para tragar grandes presas.
Mary-Ruth Low, oficial de conservación e investigación de las Reservas de Vida Silvestre de Singapur, dice que las pitones pueden estirar sus mandíbulas según el tamaño de su presa.
Eso puede incluir animales tan grandes como cerdos o incluso vacas.
Contenido GEC