El rey Carlos III saludó este viernes a cientos de personas apostadas en las cercanías del Palacio de Buckingham, en el centro Londres, antes de celebrar el sábado su coronación oficial en la Abadía de Westminster como monarca del Reino Unido.
El soberano, de 74 años, llegó en coche a la avenida The Mall acompañado del príncipe Guillermo, heredero al trono, y su esposa Catalina, que también conversaron con los ciudadanos que contemplarán de cerca la procesión real del sábado, algunos de los cuales llevan ya varios días espera.
Con traje azul marino y corbata rosa, el rey sonrió y habló con numerosos personas, mientras miembros de su equipo de seguridad sugerían al público que dejaran sus teléfonos móviles y les instaban a “disfrutar del momento”.
Visitantes de diversas partes del mundo se acercaron a los miembros de la familia real para trasmitirles buenos deseos antes de la coronación: “Rey Carlos, es un gran honor conocerle, venimos desde Estados Unidos”, le dijo una mujer al monarca, mientras otra le comentaba que ha llegado desde Tailandia.
Catalina, por su parte, deseó a los ciudadanos que lo pasen lo mejor posible en un fin de semana en el que numerosos pueblos y distritos del Reino Unido celebrarán fiestas callejeras en ocasión de la coronación.
Carlos III será el cuadragésimo monarca que ascenderá oficialmente al trono en la Abadía de Westminster, donde los reyes ingleses y británicos han sido coronados durante cerca de mil años.