Ocho niños han muerto en la región Piura por el llamado ‘golpe de calor’. Ante la alerta, autoridades de salud brindan una serie de recomendaciones para evitar que las altas temperaturas afecten no solo a los pequeños, sino también a los adultos mayores.
César Cabezas del Instituto Nacional de Salud (INS) explica que la persona sufre de sobrecalentamiento cuando su temperatura corporal sube por encima de los 38 °C. “Esa alteración produce una falla multiorgánica, capaz de afectar el hígado, el corazón, |los pulmón y riñones”, sostiene.
Los más propensos a ‘golpes de calor’ son los niños menores de 2 años, cuyos cuerpos no disponen de mecanismos para manejar el calor y los viejitos, que se deshidratan con facilidad.
Los afectados presentan fiebre, irritabilidad, dificultad para respirar y diarreas.
“La temperatura se eleva de forma paulatina hasta producir la pérdida de conocimiento y convulsión, fase en que se desarrolla el temido ‘golpe de calor’”, indica.
PRIMEROS AUXILIOS
Si estamos al lado de una persona afligida por las altas temperaturas, lo recomendable es abrir las ventanas y colocarle compresas de agua fría (no helada) sobre la piel. Y al momento de llevarlo hacia un establecimiento de salud, hay que tener a la mano un recipiente con agua y toalla para seguir refrescando su cuerpo hasta que reciba atención médica.