El avistamiento de ballenas es una de las actividades turísticas más atractivas y energizantes para aquellos que aman la naturaleza. Por eso, el Gobierno Regional de Tumbes de la mano con la Dirección de Comercio Exterior y Turismo (Dircetur) de Tumbes y la Municipalidad Distrital de Canoas Punta Sal promocionan esta actividad con el objetivo de impulsar la reactivación económica y el turismo.
Nuestro mar constituye un corredor biológico privilegiado para el tránsito de ballenas, los mamíferos marinos más grandes del planeta, en especial de las ballenas jorobadas, cuya temporada de avistamiento para los turistas empezó en julio y termina en octubre frente a las costas de Piura y Tumbes.
“Esta reactivación ha generado fuentes de trabajo para el personal de la zona, puesto que se ha requerido de esfuerzos y arduo trabajo, logrando la entrega del Sello Safe Travel, lo que nos permite brindar seguridad a nuestros turistas”, dijo el gobernador regional, Wilmer Dios Benites.
Los balnearios de Máncora, Cabo Blanco y Los Órganos (Piura), así como Punta Sal y Zorritos (Tumbes) se convierten en destinos imperdibles durante el periodo de avistamiento y es de gran disfrute para los amantes de la naturaleza, pues es muy fácil observar los desplazamientos, saltos y ‘cantos’ que realizan las ballenas.
Las playas del norte del país están reconocidas como destinos seguros para el viajero nacional como extranjero debido a que cuenta con el Sello Safe Travel. Se espera recuperar, gracias al avistamiento de ballenas cerca de 30,000 visitantes que venían antes de la pandemia.
El avistamiento de ballenas se puede apreciar a partir del mes de julio que se extiende hasta fines de octubre, informó el alcalde distrital Reynaldo López Cruz y anunció la entrega a la Municipalidad Distrital de Canoas de Punta de Sal, 7 sillas anfibias, con el propósito de incluir a personas con discapacidad en actividades turísticas en el mar.
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