Por muchos años, el crujido de huesos se ha atribuido al factor edad. Si bien es cierto, esta es la causa más común, ya no es excluyente. Este sonido responde a un fenómeno llamado cavitación, que consiste en la liberación de líquido en las articulaciones junto con gases, ocasionando lo que se conoce como crujido de huesos. Si al levantarte, agacharte o subir escaleras, tus articulaciones hacen un ruido extraño, probablemente tu cuerpo esté tratando de alertar sobre algún problema mayor.
También puedes leer: Alivia el dolor de rodillas con estos consejos
Sylvia Rodríguez, nutricionista del equipo Magnesol, comparte las 5 causas más comunes de este malestar:
1. Falta de magnesio:
Una deficiencia de magnesio puede provocar que, tanto huesos como articulaciones, presenten este chasquido en diferentes partes del cuerpo. El consumo de este mineral en la dosis adecuada puede ayudar a mantener el correcto funcionamiento de músculos y nervios, así como, permite tener huesos fuertes durante las diferentes etapas de la vida, ya a sea que se consuma a través de la alimentación regular, o mediante suplementación.
2. Lesión en meniscos:
Si se presenta un ruido al flexionar la rodilla, se puede tratar de una lesión en los meniscos. Es importante evaluar qué otros síntomas se presentan junto con el crujido, ya que, si se llegase a tener dolor, se debe visitar a un fisioterapeuta para evaluar la condición del paciente. Un menisco roto tiene la capacidad de girar sobre sí mismo y esto, como resultado, genera un ruido a modo de búrbuja. Si esta condición no se trata a tiempo existe la posibilidad de que la situación empeore e impida la movilidad de la pierna.
3. Hiperlaxitud:
Este tipo de chasquidos, en pacientes hiperlaxos, se da debido a una condición en la que existe una movilidad exagerada en las articulaciones, lo que permite que tanto piernas como brazos tengan un rango de movimiento más desarollado que otros. Este tipo de crujidos carecen de dolor, ya que el estado de los huesos y articulaciones no se ve afectado.
4. Artrosis:
Esta patología produce rigidez en los músculos, incapacidad funcional y dolor. Generalmente, la artrosis se localiza en la columna y zona lumbar. Otros pacientes aseguran que, en hombros, manos, cadera y rodillas, el crujido es más común. Junto con la dolencia en estas zonas suele inflamarse el área, por lo que, acudir inmediatamente al médico será la forma más rápida de detectar si se tiene indicios de artrosis y seguir un tratamiento.
5. Bruxismo:
El bruxismo es un trastorno que afecta la mandíbula y dientes, ya que, al apretarlos de manera inconsciente se genera un crujido. Generalmente, esta condición médica se denota durante las noches. Es asi que, si se llegara a presentar sonido en esta zona, agendar una cita, ya sea con el especialista en cirugía oral, maxilofacial o incluso con un odontólogo, podría brindar mayor alcance de cómo mejorar el crujido de los dientes.
Te puede interesar:
El dolor físico y sus emociones: Conozca cuáles son y cómo tratarlos
Traumatología infantil: El sobrepeso acelera las condiciones y fracturas
¿Cuáles son las claves para detectar si sufro de bruxismo y cómo debo tratarlo?