Cuando el paciente de Covid-19 es dado de alta, existen síntomas posteriores como debilidad muscular, disnea o la sensación de falta de aire, tos seca, problemas para ingerir o tragar, conocido como disfagia, dificultad de equilibrio y parestesia. Es decir, problemas musculares, respiratorios, locomotores y hasta digestivos.
La fisioterapia es clave contra todo esto. “El objetivo de la terapia ‘postcovid’ es fortalecer la musculatura general y, por ende, los músculos respiratorios, ayudando a recuperar fuerza, mejorar la circulación, la sensibilidad y equilibrio con movimientos básicos, como levantar las manos, soplar o aeróbicos”, indica Ricardo Rodas, coordinador de Tecnología Médica en la Universidad Católica Sedes Sapientiae.
Ante las exigencias de las cuarentenas, los pacientes de terapias físicas cuentan con alternativas como la “Telemedicina”, según se le conoce hace poco, a través de videollamadas o vídeos o aplicaciones móviles.
“Inclusive con problemas neurológicos de motricidad. Por ejemplo, pacientes hemipléjicos con ayuda de alguien llevan sus terapias en casa siguiendo guías de actividades funcionales dictadas por el especialista desde una pantalla.”, continúa explicando el experto de la UCSS.
Alguien convaleciente del Coronavirus, haya sido tratado en UCI, en casa o asintomático, debe terminar todos sus tratamientos posteriores antes que retome su vida normal para evitar que las secuelas se compliquen. Para aquellos que siguen una terapia desde casa, estos consejos son claves según el especialista Ricardo Rodas:
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