Ya sea que te conozcan o no, trátese de quienes te odian o incluso si pasan por amistades, no faltan personas que hablarán mal de ti para dejarte mal o simplemente desprestigiarte.
Ante ello, el psicólogo Ramón Torres aconseja no hacerse mala sangre y hasta no hacer caso “porque la gente mala habla mal de todos, aun sin razón, aun sin conocer, aun si no es verdad”, ya sea “de ti, de mí, de sus vecinos, de gente que no conoce, y aun de la gente buena”.
Y como “hagas lo que hagas, la gente igual hablará”, nosotros debemos aprender pronto y “dejar que la vida fluya”.
“No tomes nada como personal, porque no tiene nada que ver contigo. Y no sufras, ni tomes venganza. Ellos hablan, sea verdad, sea mentira, y no les importa hacer daño a quien se deja. Pero ignoran que todo vuelve, y que no podrán escapar de la maldad que sembraron”, señala Torres.
Sin embargo, el terreno legal es distinto al psicológico, por lo que si alguien nos atribuye un delito o una conducta deshonrosa, nosotros como afectados —con asesoría de un abogado— podemos denunciarlo penalmente en el primer caso por calumnia y en el segundo por difamación.
Quien habla mal de otros “disfraza la miseria y el vacío de su alma”, señala el especialista.
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