De todas las molestias oculares, la más frecuente en verano es la conjuntivitis o inflamación de la conjuntiva, membrana transparente que cubre el globo ocular y el interior de los párpados. Carlos Fernández, médico de la Clínica Oftalmolaser, menciona que es causada generalmente por virus y bacterias que proliferan en época de calor o por agentes químicos presentes en las playas y piscinas.
Sugiere extremar la higiene y lavarse las manos a menudo, ya que son el vehículo para que los microbios (del transporte público, servicios higiénicos y manijas) terminen en la vista. También es primordial usar gafas al nadar, porque la clamidia, bacteria resistente al cloro, provoca conjuntivitis.
SÍNTOMAS
La conjuntivitis causa enrojecimiento, ardor, lagrimeo y secreción (legaña). Este último inicia el contagio. De llegar a esta situación, hay que evitar frotarse los ojos y optar por limpiarse con pañuelos desechables limpios.
TRATAMIENTO
En la mayoría de casos, la conjuntivitis es leve y dura alrededor de 7 días. Pero de persistir las molestias, se debe acudir a un especialista para iniciar un tratamiento específico y evitar que se propague a la córnea (tejido del ojo).
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