POR: FRANCESCA BRAVO
En la temporada de verano, la mayoría de personas aprovecha el clima para exponerse al sol y broncearse. Sin embargo, no se considera el peligro que eso supone a nuestra piel. Uno de los principales factores de riesgo para el desarrollo del cáncer de piel es la sobreexposición solar.
Martín Falla, oncólogo de Oncosalud, explica que esta patología es una de las más comunes en el país y se divide en dos grandes grupos: no melanoma y melanoma.
“El no melanoma afecta, principalmente, a personas de piel blanca a partir de los 40 años que han estado expuestas a los rayos solares durante mucho tiempo. Por su parte, el melanoma es un cáncer mucho más agresivo que puede ser mortal si no se detecta a tiempo”, afirma Falla, quien nos brinda estos consejos preventivos.
1. Horas de exposición. Evite la exposición directa al sol entre las 10 de la mañana y las 4 de la tarde. Estas son las horas con mayor intensidad de rayos ultravioleta (UV).
2. Bloqueador solar. Se recomienda aplicarse el protector solar a diario, de preferencia 30 minutos antes de exponerse al sol y volver a aplicarse cada 2 horas así esté nublado. El bloqueador debe proteger de los rayos UVA y UVB, además de contar con un factor de protección solar (FPS) de 30 como mínimo.
3. Accesorios de protección. Es necesario usar ropa con protección, incluyendo un sombrero de ala ancha que cubra la cara, el cuello y las orejas. Los lentes de sol deben contar con protección UV.
4. No existe bronceado saludable. Eso demandaría muchas horas de exposición solar y en ese proceso dañamos nuestra piel. No lo hagas.
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