En su casa rodeada de cerros, en Tablada de Lurín, Gumercindo Accostupa Ccahua golpea una y otra vez una enorme piedra. Con cada martillazo, moldea su dura corteza y logra convertirla en una linda y valiosa pieza de arte. Este hombre de 75 años lleva el talento en las manos.
Qué impresionante es esta escultura de toro, ¿cuánto tiempo lleva haciéndola?
Tengo meses esculpiéndola. Y es que la labor de un escultor es de largo aliento y mucha paciencia. Este fue un pedido que nunca terminaron de pagarme, pero lo sigo haciendo por satisfacción propia.
¿Cuál es el proceso para hacer una obra como esta?
Lo primero es encontrar la piedra, puede ser de granito o mármol. Luego es picar, con comba y cincel, cortar con una máquina especial, pulir, pintar y listo.
¿Cómo descubrió su habilidad como escultor?
Desde los 12 años me dediqué a picar y extraer piedras de los cerros para venderlas como material de construcción. Pero conocí a un joven artista que me enseñó a esculpirlas. Yo no pateo piedras, las convierto en arte.
¿Cuáles fueron sus primeros trabajos?
Al comienzo hacía piletas de piedra. Después me interesé por hacer bustos de héroes y figuras de animales.
¿Fue difícil?
No, mucho. Al inicio tenía algunos accidentes, recuerdo que una vez me golpeé el dedo medio de esta mano (muestra su mano izquierda). Al momento no sentí nada, pero después vino un dolor insoportable.
¿De dónde extrae estas piedras?
El granito lo traigo de Arequipa. El transporte es lo más costoso en este negocio.
¿Bustos de qué héroes ha hecho?
En provincias he hecho de Francisco Bolognesi, Miguel Grau, Francisco Pizarro. Fueron pedidos para que sean puestos en patios de colegios. Además, hago esculturas de animales para decorar hoteles.
Y la escultura más grande...
Yo puedo hacer cualquier tamaño de escultura, el tema es encontrar una roca de gran dimensión para poder esculpirla. En mi récord tengo una de 1.60 metros.
NUEVOS RETOS
Tiene muchas piedras cortadas en rectángulos pequeños, ¿para qué las usa?
Este es un nuevo negocio que estoy emprendiendo junto a tres de mis 16 hijos. Es para hacer acabados de construcción.
¿16 hijos?
Sí, pero solo trabajo con tres de ellos.
¿De dónde extrae esas piedras?
De aquí, de Lurín.
Es curioso, usted trabaja con piedra pero su casa es de madera...
Este es mi taller, pronto haré la casa soñada para mí y mis nietos.
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