NO SE GUARDÓ NADA. Samantha Batallanos se presentó en ‘Café con la Chevez’, el podcast de Trome, y no solo se animo a hablar acerca de sus inicios en la farándula peruana, las parejas que tuvo y el tormentoso romance que tuvo con Jonathan Maicelo, sino que además confesó sus más íntimos secretos y pecados, como cuando le fue infiel al ex chico reality Duilio Vallebuona.
“Sí (fui infiel), pero la pagué con creces. Yo digo que una persona infiel sí puede cambiar, yo sí cambié, pero tiene que ser por decisión propia. Tuve una época que fui infiel, la persona que yo amaba en ese momento se dio cuenta y me perdona. Yo no quería perderlo, seguimos la relación pero se volvió muy tóxica y me di cuenta que esa relación ya se había malogrado. En ese momento dije ‘nunca más me va pasar esto’. El siguiente enamorado que tuve fue Jonathan”, sostuvo en un principio la modelo.
Luego aceptó que en un momento mantuvo una relación paralela con Vallebuona y Maicelo. “A Jonathan lo estaba conociendo ahí mismo, a Duilio le habría sacado la vuelta en todo caso, con él sí salía bastantes días, sí nos veíamos periódicamente, él fue el más sorprendido. A Jonathan lo conocí una noche antes. Fue un fuego, no sé qué me pasó. El día que lo conocí pasó de todo”, precisó.
En la entrevista, Batallanos también admitió que ya limó asperezas con Maicelo, a quien consideró “el amor de su vida”, a pesar del accidentado fin de su relación con denuncias de agresión. “Hemos vivido un año 24/7, yo no me podía despegar de él. Para mí fue el hombre de mi vida, me enamoró a tal magnitud que no me quería despegar de él y visceversa”, afirmó Samantha.
“Éramos como mejores amigos, compartíamos todo, nuestra manera de comer, entrenábamos, nuestra dieta, somos abstemios los dos”, agregó.
Finalmente, también señaló que el boxeador se disculpó con ella. “Me pidió perdón. Me dijo que había recapacitado, que había tocado fondo. A pesar de que trató de estar bien para las cámaras y las redes, en realidad dice que la pasó súper mal. Me pidió perdón, lo vi más consciente pero igual los hechos están y son muy delicados, no puedo pasar por agua tibia todo lo que pasó en el pasado. Yo también he tenido errores, pero no era la manera de comportarnos. Las pruebas están, pero bueno ya, creo que ya todo queda en el pasado y luego cada uno para adelante. Yo ya lo había perdonado, le había deseado lo mejor. Tengo una terapia que cumplir, la que me mandó el ministerio”, confesó.
Contenido GEC