Laly Goyzueta ha demostrado su gran civismo y preocupación por la sociedad al ofrecerse como voluntaria en los ensayos clínicos para la nueva vacuna contra el coronavirus. La actriz nos regaló unos minutos de su tiempo para responder esta y otras preguntas de nuestro cuestionario.
Laly, ¿qué te enseñó el 2020?
Ha sido un año muy aleccionador. Aprendí que las cosas pueden cambiar de un momento a otro. Me enseñó a darle el verdadero valor a las cosas y dejar de preocuparme por lo que no era importante.
Eres voluntaria en las pruebas para la vacuna contra el coronavirus, ¿fue difícil tomar la decisión?
Sinceramente, no fue una decisión difícil. Sentí la necesidad de hacer algo, de contribuir con la ciencia, con mi país. Me informé, despejé mis dudas y confié.
¿Qué te desespera?
Ver que la corrupción, la injusticia, la hipocresía, el machismo y la violencia siguen enquistados en nuestra sociedad.
¿Una frase o palabra que siempre repites?
¿Dónde dejé mi teléfono? (risas).
Si no fueras actriz, ¿qué serías?
Me hubiera gustado ser azafata de avión, para conocer todo el mundo.
El amor es...
Dejar ser al otro. Aceptarlo sin juzgarlo.
Tres palabras que te definen...
Guerrera, rebelde y simple.
La vida es...
Hoy. No te la pierdas.
¿Qué haces primero al despertarte?
Me sacudo la flojera y hago media hora de ejercicios.
Cuando estás estresada, ¿qué haces?
Escucho un audio de meditación personalizada que me grabó mi gran amiga Elsa Oliveros. ¡Es genial!
¿Cómo te imaginas en 10 años?
Me veo nutriendo a muchos peruanos con nuestros deliciosos snacks saludables mufFit. Y con más arrugas en la cara formadas por mis anchas sonrisas.
¿Cuál es el sueño que te falta cumplir?
Tengo muchos sueños. Seguir creciendo como actriz, aprendiendo de mis compañeros. Ver crecer a mi hijo. Disfrutar a mis padres. Compartir la vida con mi esposo. Sentirme orgullosa de ser quien soy.