¡Feliz Día de la madre! Convertirse en madre es una experiencia única para las mujeres, sin embargo dar ese paso importante no es tan fácil por distintos motivos: el trabajo, no tener a la pareja idónea, problemas de fertilidad, metas personales y un largo etcétera.
Pero lo que está claro es que convertirse en madre a los 40 años, no es mejor ni peor que ser madre a los 20 o a los 30 años. Finalmente es una decisión personal.
Por ejemplo, muchas famosas decidieron experimentar sus embarazos superada la barrera de los 40 años, tras haber dedicado los primeros años de su vida a sus carreras profesionales. A continuación, alguna de ellas.
La actriz y productora australiana se convirtió en madre en 1992, cuando ella y su esposo, Tom Cruise, ya habían adoptado a Isabelle Jane y Connor Cruise. Nicole tuvo a su primera y única hija biológica, Sunday, cuando tenía 41 años. Dos años después, recurrió a un vientre de alquiler para tener a Faith Margaret.
La actriz mexicana encontró en Francois Henri Pinault, el hombre con el que decidió formar una familia. En 2007, Salma se convirtió en madre de Valentina Paloma, cuando tenía 41 años.
Madonna se aventuró a ser madre por primera vez a sus 38 años, cuando dio a luz a Lourdes León. Más tarde, la ‘Reina del Pop’ decidió que se convertiría nuevamente en mamá, está vez con 42 años y casada con el director de cine Guy Ritchie; Rocco fue el nombre que le dieron a su hijo. En total, Madonna tiene seis hijos, cuatro de ellos adoptados.
La reconocida actriz de Hollywood tiene cuatro hijos, todos ellos concebidos con su esposo, el escultor Don Gummer. A los 42 años, Meryl tuvo a su hija menor, Louisa.
La actriz y cantante estadounidense fue madre de mellizos, a los 42 años. Sin embargo, Mariah confesó que no le resultó fácil quedar embarazada. Moroccan y Monroe son del fruto de la relación que Carey mantuvo con el rapero y actor Nick Cannon.
Eva Mendes escogió a Ryan Gosling para que sea el padre de sus hijos. Eva es mamá de dos niños: Esmeralda Amada, hoy de 5 años, que nació cuando la actriz tenía 40. Amada Lee llegó al mundo dos años después.
Aunque su primer hijo, Caleb, llegó cuando la actriz tenía 37 años, tuvo a su segunda hija en el 2002 cuando ya tenía 42.
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