¡Emprende Trome! Como ya te hemos dicho antes, la Sunat es el ente que se encarga de recabar nuestros impuestos. Se trata de una entidad que no tiene corazón a la hora de pedir que le pagues, por lo que no estar al día o deberle dinero podría arrastrar a tu negocio a merecer una multa, cuyo monto podría poner en riesgo la continuidad de tu emprendimiento.
Por eso Trome, nada de tener problemas con la Sunat. Finalmente, podemos deberle dinero, pero es posible fraccionar la deuda con el mínimo interés. Lo problemático es no tener al día la contabilidad, que es lo que finalmente acarrea las multas.
Debes preguntarte "¿ cuáles son las multas que pone la Sunat, tío Trome?". Te explico ya mismo.
Las multas más comunes de la Sunat tienen 4 orígenes
1. Por legalizar los libros contables fuera de fecha
2. Por declarar impuestos fuera de los plazos establecidos
3. Por gastos no reconocidos por la Sunat
4. Por no emitir comprobantes de pago
Los montos por estas multas se determinan en función a porcentajes del total de tus ingresos al mes, pero sanciones por no emitir comprobantes de pago podrían terminar con el cierre de tu negocio. Así que evita tener problemas con la Sunat. Para determinar qué hacer para no tener problemas con esta entidad, conversamos con el Dr. Luis García Romero, especialista en derecho tributario del Estudio Muñiz, quien le aconseja a todos los Tromes 5 consejos que deben anotar en la pared más visible de su oficina.
1. Contar con un contador de confianza: Trome, el sistema tributario no es fácil y aunque tu empresa sea pequeña debes contar con la ayuda de un contador especializado. Contratar un servicio de este tipo podría costarte entre 150 y 200 soles si tu negocio es pequeño.
2. Tener en orden todas las facturas, órdenes de compra, boletas, guías de remisión, contratos, y todo lo que represente el acervo documentario de tu empresa en términos de contabilidad. La Sunat puede pedirte documentos hasta de cuatro años atrás, pero que muchas veces son cinco según sus plazos. Guarda todo.
3. Bancarizar todas las operaciones para que queden registro de estas. No existe nada mejor que poder tener clara la ruta de cada sol que entró o salió de tu empresa. Para eso, lo más sencillo es hacer todas las operaciones a través de los bancos. No olvides además que es obligatorio bancarizar las operaciones por más de US$ 1000 o S/.3.500.
4. Contratar y hacer negocios solo con proveedores formales, que entreguen boletas, facturas, comprobantes de pago y que estén además bancarizados. A veces va a ser más caro pero peor será que la Sunat te ponga una multa por tratar con informales.
5. A final del año hacer el cierre fiscal respectivo y solo por precaución recurrir a una segunda opinión contable. Nunca te fíes de un solo contador a la hora de presentar el balance de fin de año, que se presenta todos los meses de marzo. Un segundo experto podría identificar algún error que a tu contador de confianza se le puede haber pasado.
Ya sabes Trome, la Sunat no te pone multas por deberle impuestos, sino por no estar al día en tu contabilidad.