Bombones pintados a mano, lápiz de labios y zapatos hechos de chocolates son algunas de las ‘joyas’ creadas por Giorgio Demarini, quien ha logrado ubicar su marca ‘Roselen’ entre las diez mejores tiendas de chocolates del mundo.
Cuéntanos, ¿cómo nace la historia de ‘Roselen’?
Mi madre preparaba los chocolates de manera muy artesanal, ella nos hacía los dulces para nuestras fiestas infantiles, luego sus amigas les hacían pedidos y poco a poco fue haciéndose conocida. Cuando yo estudiaba diseño gráfico, empecé a ayudarla y es así como nació mi pasión hasta el día de hoy.
¿De dónde viene esa pasión?
Por el lado de mi abuelita, ella hacía muchos postres.
Pero tú estudiaste diseño gráfico…
Sí, pero a mí siempre me gustó la parte artística del chocolate, sabía que se podían hacer presentaciones mucho más relacionadas al arte, se pueden elaborar diseños, y pintar bombones a mano utilizando diferentes técnicas.
¿Llevaste un curso profesional para profundizar en este tema?
Claro, llevé un curso de chocolatería profesional y un curso de elaboración, desde el grano de cacao y también una especialización en la conservación…
Con los estudios que hiciste en el extranjero, ¿cuáles han sido tus aportes a la empresa?
En el área de diseño y producción, yo me encargo de la producción y junto con mi madre pensamos qué vamos a crear, qué cosas nuevas podemos aplicar…
Sabemos que también seguiste otros cursos en Francia, ¿qué cosas aprendiste allá que no hay en Perú?
Aprendí la chocolatería artística, especialización en técnicas tradicionales. Esto me sirvió para valorar lo que es el trabajo artesanal, a utilizar cacao de origen, la cobertura de buena calidad, así como buscar ingredientes frescos.
¿Cuántos años tiene la empresa?
Nos vamos para los 16 años.
¿Qué estrategias han aplicado para estar tanto tiempo en el mercado?
La innovación, en ‘Roselen’ siempre encontrarán algo nuevo, los clientes vienen porque buscan lo clásico y también la novedad.
¿Qué fue lo más difícil para iniciar este negocio?
Lo más difícil es ‘marketearse’ y llegar a mucha gente, al principio es difícil hacerse conocido. Se tuvo paciencia y perseverancia.
¿Recuerdas con cuánto capital se iniciaron?
Fue con muy poco, esto fue un hobby, mi madre hacía chocotejas a sus amigas, luego se fue entregando pedidos a empresas, empezamos con el hotel ‘Marriott’ y eso nos ayudó mucho, y de ahí fuimos creciendo.
¿Cuántas personas trabajan con ustedes?
Unas siete personas.
¿Cuál es tu materia prima?
El cacao peruano.
¿Por qué creen que están entre las 10 mejores tiendas del mundo en su rubro?
Podría ser parte importante por el uso exclusivo de nuestro cacao peruano y la presentación exclusiva que le damos.
¿Cuántas tiendas tienen?
Dos, una en el centro comercial ‘Caminos del Inca’ y la otra en el centro comercial ‘El Polo’.
¿Cómo emplean el tema de la tecnología en su empresa?
En redes sociales nos ‘marketeamos’ y tenemos una página web donde ofrecemos los productos y se pueden hacer los pedidos. Venta por Internet y hacemos delivery.
¿Han pensado exportar?
Nuestros productos son frescos, son perecibles, para exportar los países piden tiempo de duración, pero la verdad primero queremos afianzarnos en el mercado nacional.
¿Dónde se distribuyen sus productos?
En empresas, hoteles y restaurantes A1.
¿En qué época del año tienen más demanda?
San Valentín, Día de la Madre y Navidad.
¿En qué se diferencian sus productos con los que hay en el mercado?
Pintamos a mano los bombones, esto demora porque hay que hacerlo uno por uno, es un trabajo bien delicado y minucioso. Tenemos mucha variedad de regalos, figuras de chocolates, snacks, barras…
Su punto de partida es la innovación…
Tratamos de buscar insumos locales, tenemos bombones rellenos con ají limo, huacatay, maracuyá, hierba luisa, hongos de porcón, tocino, aceitunas, granada, sal de maras, queso azul, duraznos y café. Además de zapatitos labiales y otros detalles hechos de chocolate.
¿Cómo es el control de calidad?
Es bien estricto, por eso hay muchas mermas, todo tiene que estar ordenado e impecable.
¿Cuáles son los valores de la empresa?
Innovación y constancia para mantener la misma calidad.
Ahora que están entre los mejores, ¿qué se viene para ustedes?
Expandirnos más.
¿Viajan para traer las tendencias?
A Francia, Bélgica.
¿Qué consejos le daría a los jóvenes emprendedores?
Siempre innoven, busquen técnicas nuevas, el chocolate puede dar para más, no se rindan.
Si te interesó lo que acabas de leer, puedes seguir nuestras últimas publicaciones por Facebook, Twitter, y puedes suscribirte aquí a nuestro newsletter.