Zinedine Zidane, entrenador francés del Real Madrid, consideró que el enfrentamiento de cuartos de final de la Champions League contra el Bayern Múnich será "bonito", pero admitió que es "un rival muy duro".
"No hay partido fácil, nos toca un rival muy bueno, muy duro, pero es lo que ha tocado", dijo Zidane en la rueda de prensa previa al partido de Liga del sábado contra el Athletic de Bilbao, tras conocer el resultado del sorteo de cuartos de final de la Champions.
"Tienen un buen equipo, muy fuerte, que lo está haciendo muy bien y va a ser un partido muy bonito para los aficionados y para el mundo del fútbol", añadió el técnico blanco, que se reencontrará en esa eliminatoria con Carlo Ancelotti, del que fue segundo entrenador en el Real Madrid.
"No hablé con él", dijo Zidane, antes de reconocer que será un reencuentro "maestro-alumno". "Estuve de segundo con él aprendí mucho, es una muy buena persona y sabemos lo que ha hecho aquí", explicó el técnico blanco.
"Nos conocemos muy bien los dos, pero luego en el partido puede pasar de todo", dijo Zidane, para quien en ese encuentro "lo más importante no es el dibujo, es la actitud, es la abnegación que vamos a meter nosotros".
Zidane consideró que la eliminatoria de cuartos de la Champions es "50-50, siempre es así y más con este partido", cuya ida se jugará en Múnich y la vuelta en Madrid.
"Normalmente se dice que es mejor jugar fuera primero y luego en casa, pero no tengo preferencias. Sabemos que tenemos que ir allí a hacer gol porque es importante hacer gol fuera y luego tenemos la vuelta", explicó el técnico.
Metido en cuartos de la Liga de Campeones y líder de la Liga, el técnico blanco afirmó que quiere ganar todo.
"Siempre es bueno ganar todo. Tengo la misma ilusión por ganar la 'Champions' y la Liga, y tenemo esos dos retos. No hay más. Tenemos cinco partidos para llegar a la final y luego doce para la Liga", concluyó.