Alexi Gómez, hoy con 29 años, era un huracán de talento que terminó siendo arrasado por un torbellino de ampays y situaciones extradeportivas. Un lateral izquierdo de despliegue prodigioso que además poseía un juego encarador y pícaro. Un diamante en bruto que no encontró quién pueda pulirlo para consolidarse en los clubes por donde pasó, como Universitario de Deportes y Alianza Lima, ni en la selección peruana.
Alexi Gómez se convirtió en uno de los futbolistas peruanos con mayor proyección tras su participación en el Sudamericano Sub 20 en 2013. Ese año llegó a Universitario de Deportes tras sus buenas actuaciones en León de Huánuco. Ahí estaría dos temporadas para luego emigrar al Brommapojkarna de Suecia en 2015.
Las oportunidades desperdiciadas
En tienda crema, sin embargo, la polémica ya lo acompaña. En su primera temporada alguna vez fue “borrado” en una previa por llegar tarde a un entrenamiento e incluso debutó en los ampays de un programa de TV al ser captado saliendo de una discoteca con varias chicas y junto a otro futbolista.
También protagonizó un escándalo en el club de Ate por supuestamente hacer ingresar a una mujer al hotel de la concentración, cuando ya dirigía Óscar Ibáñez, quien lo separó del equipo. El tema terminó en acciones legales y hasta en una reducción del 60% de su salario.
Su paso en Suecia fue breve. Luego llegaría al San Luis de Quillota en Chile, donde su DT le bajaría el dedo por temas extradeportivos. “Es una falta grave, el hecho de venir con hálito alcohólico a un entrenamiento, más aún, luego de haber perdido horas antes el partido Santiago Wanderers. Es una falta hacia la institución, hacia los compañeros y cuerpo técnico”, dijo el DT Miguel Ramírez en 2015 sobre Alexi Gómez.
En 2018 llegó al Atlas de México pero un video suyo jugando una pichanga antes de un trascendental encuentro hizo que le bajaran el dedo. Luego pasaría por la MLS y Argentina sin suerte, hasta el 2019 en que regresaría al Perú, esta vez a Melgar.
Su última oportunidad
Sin un rendimiento que justifique el fichaje, en 2020 llegaría como uno de los grandes jales de Alianza Lima, club donde sumaría ampay tras ampay en plena pandemia, siendo parte del descenso deportivo del club íntimo para luego acabar su vínculo.
Tras su fracaso en Alianza Lima y ya con las puertas cerradas en Universitario de Deportes y la selección peruana, el lateral aterrizó en UTC de Cajamarca en el 2021, donde hizo 2 goles en 20 partidos. Este 2022, ya lejos de la órbita de los principales clubes y descartado totalmente de la blanquirroja, Alexi Gómez jugó en el Deportivo Llacuabamba, con el que disputó la Segunda (Liga 2), club con el que quedó décimo y no pudo lograr el ascenso.
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