En la guerra por los derechos de televisión, el deber debió ser no televisarlo. Las cámaras trabajaron, pero la imagen fue pálida y el sonido nunca encontró un grito. En un partido muy esperado, en la cancha hubo dos equipos que tuvieron pánico de perder. La lógica se dio y ninguno ganó. Sábado por la noche en Matute y el 0-0 friccionado, tosco y aburrido entre Alianza Lima y Cristal no pagó ni media entrada. Mucho ruido, luces y fuegos artificiales opacaron el juego de los dos.
El primer tiempo careció de combustible y así nadie arrancó. A los primeros minutos de ímpetu aliancista, le siguió el tiempo de un Cristal más maduro. Eso sí, con una baja versión de Alejandro Hohberg y Joao Grimaldo, y ejecutando pésimo las pelotas paradas.
Mejor estuvo la sorpresa de Jostin Alarcón que se encontró solo en el área a los 7′ o el zurdazo de Brenner que se dio un cara a cara contra el poste (29′). El local fue un Alianza de ‘Reynadependencia’ y el ex Cantolao desapareció.
Arriba, Hernán Barcos tuvo la lentitud lógica de un tipo de casi 40 años. Pese a ello, el tiro libre del ‘Pirata’ que exigió al golero celeste a los 45′ fue la más clara de un equipo que empezó el año siendo ‘Dream Team’ y hoy es solo ‘team’, porque los rendimientos son terrenales.
Pero claro, existió un segundo tiempo. Allí, el mismo poste que le dijo ‘no’ a Brenner repitió la negación con el tiro de Gabriel Costa (72′). Alianza cambió en el segundo tiempo y el ingreso del extremo le dio un par de puntos más a sus deseos.
Pero los cambios en Cristal hicieron que no se tirara hacia atrás, que manejara el tiempo y encima terminó atacando. Un intento de Washington Corozo y un penal en el final solicitado al VAR fueron el cierre del mal juego de ambos equipos. Los pupilos de Tiago Nunes ahora se enfocan en la Sudamericana. Si antes del partido ‘Melcochita’ hubiera dicho ‘No lo vean’, era para hacerle caso.
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