El triunfo de Alianza Lima 3-2 sobre Deportivo Garcilaso dejó una imagen pocas veces vistas en tienda blanquiazul. Hernán Barcos discutió con Pablo Lavandeira al momento de ejecutar un penal. Esto llevó a que el uruguayo nacionalizado peruano luciera muy ofuscado.
Barcos anotó desde los 12 pasos e igualó a Rosinaldo Lopes como máximo goleador extranjero de la historia de Alianza Lima. Sin embargo, Lavandeira no se acercó a celebrar con el grupo.
En declaraciones a la prensa después del partido, Barcos ensayó una explicación, afirmando que este tipo de discusiones son normales ya que todos quieren patear penales y marcar goles.
“Es normal, todos quieren patear penales. Le dije que la vez pasada se lo di y le dije que hoy me tocaba. Pablo sabe respetar y cómo funcionan las cosas. Nos queremos mucho y las cosas quedan ahí”, manifestó el ‘Pirata’.
“Feliz por cumplir el objetivo, seguiremos trabajando hasta fin de año. Hernán Barcos es mi amigo, entre amigos siempre hay discusiones, malos entendidos. Yo feliz que Alianza Lima ganó y sea el máximo goleador”, sostuvo.
Pablo Lavandeira vivió una jornada peculiar en el Alianza Lima vs. Deportivo Garcilaso. El uruguayo nacionalizado peruano quiso patear el penal que él mismo fabricó, sin embargo, el encargado era Hernán Barcos y no iba a dejar pasar la oportunidad de hacer historia en La Victoria.
Esto molestó a Lavandeira, quien quería patear el penal y protagonizó una pequeña gresca con el ‘Pirata’. La molestia del volante se extendió hasta el final del compromiso, donde incluso se le vio un poco apartado del resto de sus compañeros.
Todo ocurrió a los 83′ cuando el uruguayo recibió una dura falta en el área. El árbitro marcó el penal y Lavandeira se dispuso a ejecutar el penal cobrado en su contra; sin embargo Barcos entró en escena.
Esto no le gustó a Pablo Lavandeira, quien no se quedó callado y continuó reclamándole al argentino, que buscaba marcar su gol 37 para igualar el récord de máximo goleador extranjero de Alianza Lima, que ostenta el brasileño Rosinaldo López.
Finalmente a Pablo Lavandeira no le quedó otra que retirarse del área, aunque refunfuñando por no poder cobrar el penal que cometieron en su contra. En tanto Hernán Barcos pudo ejecutar le penal y ‘cambiarlo’ por el tercer gol de Alianza Lima.
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