Una drástica sanción “de por vida” es lo que ha solicitado el presidente del Istanbul Basaksehir para el árbitro rumano, Sebastian Coltescu, acusado de comentarios racistas durante el partido por Champions League ante PSG en el ‘Parque de los Príncipes’.
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Göksel Gümüsdag, titular del cuadro turco, habló con la prensa de su país antes de abandonar París. “La situación debe tener una sanción ejemplar. Este tipo de árbitros deberían ser expulsados de por vida”, señaló el directivo.
“El 8 de diciembre pasará a la historia mundial como un día de resistencia contra el racismo”, añadió el directivo de Istanbul que terminó en el último lugar de la clasificación en el Grupo H de la Champions League.
El árbitro rumano Sebastian Coltescu se refirió como ‘el negro’ al asistente del Istanbul Basaksehir, Pierre Achille Webó, buscando que el juez principal lo amonestara con una cartulina roja. Esto provocó la ira de ambos equipos, que abandonaron el terreno de juego en el minuto 14 como protesta.
El partido se reanudó el miércoles con un nuevo equipo arbitral. El PSG, ya en octavos de final, se impuso por 5-1 con goles de Nyemar y Kylian Mbappé.
La UEFA, el órgano rector del fútbol europeo, anunció que iniciaría una “investigación en profundidad” sobre las acusaciones de racismo contra el árbitro rumano.
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