Mientras más, mejor. La FIFA aprobó por unanimidad que la Copa del Mundo se juegue a partir del 2026 con 48 selecciones, decisión que deja a un lado las preocupaciones que apuntaban a que una ampliación del formato podría reducir el estándar del torneo o que sea demasiado largo y engorroso.
A través de su cuenta de Twitter, la FIFA dijo que desde el 2026 la Copa del Mundo se jugará con una primera ronda de 16 grupos de tres equipos. Luego los dos primeros de cada llave serán los que accederán a los dieciseisavos de final y, a partir de esta instancia, se jugará por el sistema de eliminatoria.
El presidente de la FIFA, Gianni Infantino, que sustituyó al cuestionado Joseph Blatter en febrero, había hecho de la ampliación del Mundial una de sus promesas de su exitosa campaña electoral. Inicialmente había sugerido un torneo de 40 selecciones, pero luego añadió otras ocho en octubre.
Los críticos a la medida, entre ellos los poderosos clubes europeos así como algunos entrenadores destacados, han dicho que la FIFA está manipulando una fórmula ganadora, mientras que otros señalan que con es cambio el ente rector del fútbol mundial incrementará sus ingresos económicos al disputarse más partidos.
Pese a que se desconocen los detalles de cómo se distribuirán los cupos a partir de la Copa del Mundo de 2026 –cuya sede aún no se define-, se prevé que Europa contaría con 16 clasificados, la Conmebol con 6.5, África con 9.5, la Concacaf (Centroamérica) con 6.5, Asia con 8.5 y Oceanía con 1.
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