Con otra demostración de fútbol defensivo y temple, la Juventus empató el miércoles sin goles en cancha del Barcelona y selló su boleto a las semifinales de la Champions League por global de 3-0 en la eliminatoria de cuartos de final, vengando la final pérdida dos años atrás ante los azulgranas y dando un paso más en su afán por reconquistar el trono europeo.
Dando muestras de su poderío y reforzando su candidatura, el actual campeón de Italia rentabilizó la victoria por 3-0 del partido de ida en Turín y eliminó al Barcelona, que se despidió prematuramente de la Champions apenas una ronda después de haber protagonizado la mayor remontada de la historia de la competición, cuando le endosó un 6-1 al Paris Saint-Germain y volteó el 4-0 en contra de la ida.
Esta vez no hubo otra reacción épica por parte del equipo de Lionel Messi, Luis Suárez y Neymar, y fue la Juventus la que validó su renovado proyecto, desde que perdiera la final de 2015 contra el cuadro catalán por 3-1.