Los hijos de Britney Spears, Sean y Jayden, han roto su silencio sobre por qué no asistieron a la boda de su madre con Sam Asghari en junio pasado. Los adolescentes se han sincerado en una reveladora entrevista con la realizadora de documentales Daphne Bark para ITV y la princesa del pop ha respondido a lo dicho por sus hijos.
En extractos obtenidos por Daily Mail, Jayden explicó: “En ese momento, simplemente no era un buen momento para ir. No digo que no esté feliz por ella, estoy muy feliz por ellos, pero ella no invitó a toda la familia y luego, si solo íbamos a ser Preston y yo, simplemente no veo cómo esa situación habría terminado en buenos términos”.
En la entrevista, Jayden también enfatizó que “no había odio” para su madre, pero admitió que “tomará mucho tiempo y esfuerzo” reparar su relación rota. El adolescente agregó: “Creo al 100% que esto se puede arreglar. Solo va a tomar mucho tiempo y esfuerzo. Solo quiero que mejore mentalmente. Cuando se mejore, tengo muchas ganas de volver a verla”.
Ante lo dicho por sus hijos, Spears lanzó una larga carta dirigida a sus retoños a través de su reciente reabierto Instagram que inicia así: “He hecho todo lo posible para ser la mejor persona que puedo, teniendo en cuenta que he sido básicamente rehén en hogares con enfermeras y cabrones. Espero que mis hijos algún día entiendan mi razonamiento, rebelándome como cualquier mujer que ha estado bajo la supervisión de la tutela”.
“Le digo a Jayden que le envío todo el amor del mundo todos los días por el resto de mi vida. Mi amor por mis hijos no tiene límites y me entristece profundamente saber su clamor de decir que no estaba a la altura de sus expectativas de una madre. Tal vez algún día podamos encontrarnos cara a cara y hablar de esto abiertamente”, continúa.
Posteriormente, arremete contra el padre de sus hijos, a quien acusa de poner a sus hijos en su contra: “Ayudé a su padre, que no ha tenido trabajo en 15 años. Supongo que es más fácil para ustedes no tener a nadie que los controle. Estoy segura de que los estándares de su padre fumando hierba todos los días benefician su vida diaria para participar en una generación muy genial. Entiendo completamente su necesidad de vivir con él, ya que tuve que jugar el papel perfecto durante 15 años para absolutamente nada”.
Finalmente, se dirige a su primogénito, quien cuestionó su salud mental en la entrevista. “En cuanto a mi salud mental, mi querido hijo, entiende que debes aprender a coger un libro y leerlo antes de cuestionar mi intelecto. Es terrible ver a vuestro padre ser un hipócrita y decir que los medios son horribles, pero los tiene hablando sobre asuntos personales”. La misiva termina diciendo que, si ellos no entienden sus circunstancias y todo lo que ha sufrido a manos de sus padres, entonces sí ha fallado.
Lamentablemente, la relación de la intérprete de “Toxic” y sus únicos hijos no está para nada bien en este momento. Ella se ha peleado públicamente con ellos y su exmarido, a través de una serie de publicaciones en sus redes sociales.
Britney Spears protagonizó The All-New Mickey Mouse Club a los 11 años y comenzó una exitosa carrera como cantante pop e intérprete con el lanzamiento del sencillo “...Baby One More Time” en 1998. Spears logró ventas masivas con álbumes como Oops!... I Did It Again y Britney, antes de experimentar una serie de reveses personales y profesionales. Se recuperó con la exitosa Femme Fatale en 2011 y luego disfrutó de una residencia extendida en Planet Hollywood Resort & Casino en Las Vegas, según biography.com.
La batalla legal de Britney Spears contra su padre comenzó en junio del 2021 y culminó en septiembre. La jueza Brenda Penny ordenó el fin de la tutela legal de su padre Jamie Spears sobre su fortuna, calculada en unos 60 millones de dólares. Desde entonces, la cantante dijo sentirse libre después de vivir 13 años custodiada, perseguida y torturada por su propio padre.
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