Instagram suele referirnos imágenes y videos agradables para la vista, pero esta vez no es así. Malachi Hemphill tenía 13 años de edad y se mató, por error, mientras transmitía en vivo, precisamente, por Instagram. El adolescente de Atlanta (Georgia, Estados Unidos) se disparó con una pistola semiautomática que llevaba en la mano izquierda.
¿Y quién se dio con la trágica escena? “Escuché un ruido fuerte. No sabía si había sido un disparo o qué”, narró Shaniqua Stevens, la madre de Malachi Hemphill. “Tocamos la puerta y lo encontramos tirado en un baño de sangre”, sigue la señora. Si bien algunos medios aseguran que la madre también se enteró de la muerte de su hijo por Instagram, esto es falso.
Cuando ella y su hija vieron la escena digna de una sangrienta película 'gore', la hija le pidió que apague el celular. Fue entonces que Shaniqia vio que Malachi estaba realizando una transmisión en vivo por Instagram. A continuación el reporte de la TV de Estados Unidos, vía YouTube:
La madre asegura que ella vigilaba al pequeño para que no cometa algo malo. Luego se supo que el Malachi obtuvo el arma mediante un amigo. Nadie en Instagram se ha pronunciado sobre esta tragedia.
“Es un dolor que nunca se va a ir, él era mi único hijo y solo tenía 13", se lamentó la madre. Todo el barrio la apoya en estos momentos.