Esa disciplina, que desde pequeño le inculcó su papito Rafael cuando estaba con vida, le permitió a Alessandro Lisarazo Ortiz, un jovencito de 17 años, lograr su ansiado ingreso a la Universidad Nacional de Ingeniería (UNI) y lo hizo en el primer lugar del cómputo general. Estudiará la carrera de Ingeniería de Minas y obtuvo un puntaje de 17.396.
“Estoy muy feliz. Ingresé en el primer intento y este logro es para mi papá, que se fue al cielo hace 5 años. Siempre lo visito en el cementerio”, contó emocionado Alessandro.
Se preparó dos años en la Academia César Vallejo y confiesa que hizo varios sacrificios para cumplir su meta, como dejar de usar su Facebook y levantarse a las 4 de la mañana para repasar los cursos.
“Ha sido siempre un alumno muy aplicado. Participaba en concursos de Matemática. Estamos muy orgullosos de él. Vamos a ir a comer un buffet con la familia y mañana prepararé un almuerzo rico, pasado también. Todos los días celebraremos”, indicó su mamá Zenobia Ortiz (48), quien tiene un salón de belleza en Villa El Salvador.
Para que su hijo esté sano, le preparaba un desayuno innovador, que incluía kiwicha con durazno, quinua con frutas, batido de arándanos y huevo sancochado.
En el almuerzo, pescado con frejoles o lentejas, puré de kiwicha, ají de gallina con quinua y su favorito: arroz chaufa con zanahoria y brócoli.
Por su logro, Alessandro, quien es el menor de cinco hermanos, recibió ayer un emotivo homenaje en su colegio American Sistem y en su academia, donde sus profesores y compañeros lo llenaron de aplausos y abrazos.
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