Los venezolanos llegaron a las playa. No a las de Caracas o Maracaibo, sino de la Costa Verde. Llevaron los productos que se han convertido en su carta de presentación: las arepas con pollo o carne y la tizana, ese refresco de frutas que, heladito, es ideal para matar la sed.
"La comida peruana es la número uno en el mundo, pero hemos traído algo de lo nuestro. Las 'arepas' son como una empanada con masa o harina de maíz, llevan carne o pollo y cuesta entre 4 y 6 soles.
También tenemos la 'tizana', una bebida hecha con jugos y trozos de frutas como mandarinas, fresas y sandías, a 2.5 soles el vaso", dijo Alberto Mendoza.
Así como él, otros venezolanos, que han venido al Perú huyendo de la crisis en su país, llegaron a la playa para demostrar que quieren ganase el pan con el sudor de su frente.
ARGENTINO
En la playa Agua Dulce (Chorrillos) encontramos a la trujillana Irma Gonzales, quien vendía el vaso de 'leche de tigre' a 3 y dos por 5 soles. "También tenemos arrocito con pollo a 7 soles, que va acompañado con una papita a la huancaína", dijo la comerciante.
Metros más allá estaba el argentino Roberto Sáenz, quien lleva más de 4 años en lima y que en vernao prepara cocteles y los clásicos 'chilcanos' a solo 10 soles.