La izquierda se pelea por el poder. La búsqueda por obtener la Mesa Directiva del Congreso generó un conflicto entre dos mediáticos representantes de la izquierda peruana en el país, como Verónika Mendoza (del movimiento Nuevo Perú) y Vladimir Cerrón (líder del partido Perú Libre).
Todo inició cuando Nuevo Perú compartió en su cuenta de Twitter una entrevista realizada a Mendoza, en la cual la también excongresista señalaba que “la principal alianza del cerronismo es con Dina Boluarte, [Alberto] Otárola, y toda su comparsa; ellos son parte de esta coalición autoritaria, conservadora y mafiosa, que está capturando instituciones”.
Esto generó la respuesta airada y directa del líder de Perú Libre, quien acusó a Mendoza de buscar una cuota de poder cuando Pedro Castillo y su partido ganaron la presidencia.
“¡Qué habla Verónika Mendoza, quien me pidió 5 ministerios y el premierato. Es lógico que después de parasitar a Ollanta, Villarán, Arana, PPK, Sagasti y Castillo, piense que todos tenemos su costumbre! ¡No se olvide que hizo firmar al Grupo de Puebla un reconocimiento a la dictadora Dina Boluarte, con la esperanza de reciclarse! Usted no representa a la izquierda, sino a los intereses estadounidenses con sus ONG, un peligro para el movimiento popular”, escribió en su cuenta de Twitter.
Mendoza trató de defenderse tuiteando que nunca pidió asumir algún cargo, y aseveró que los ataques del exgobernador regional de Junín son contra quien ‘no aplaude su alianza con el fujimorismo’.
En horas de la noche, en Canal N, Cerrón insistió en su acusación, y aseguró que Mendoza le pidió los ministerios “mediante la congresista Ruth Luque, y yo me reuní en la casa de ella, y ese fue su pedido. Le dije que era desproporcional, aparte que yo no decidía esas cosas (…) Finalmente tuvieron doce ministerios”.
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