Estados Unidos lanzó este jueves un bombardeo masivo contra objetivo en Siria. Son por lo menos 70 misiles tele dirigidos, en respuesta al ataque con armas químicas que dejó más de 80 muertos y por el que responsabilizó al líder de ese país, Bashar al Asad.
Una fuente del Pentágono informó que los 70 misiles Tomahawk fueron lanzados contra la base aérea de Shayrat, en Siria, desde donde Estados Unidos piensa que partió el ataque con armas químicas.
De estos, un total de 59 misiles alcanzaron la mencionada base aérea en Siria, que estaría "asociada al programa" de armas químicas y "directamente vinculada" a los horribles acontecimientos del martes, señaló una fuente del gobierno de Estados Unidos.
Este mismo jueves, en la sede de las Naciones Unidas, el Consejo de Seguridad no logró alcanzar un acuerdo sobre una declaración sobre el ataque con arma química en Siria, cuando ya se había divulgado la información de que el gobierno de Donald Trump tenía listo un plan de ataque contra Siria.
El ataque de esta noche representa un claro giro en la política de Estados Unidos hacia el conflicto en Siria. Hace apenas una semana, altos funcionarios estadounidenses, incluyendo la embajadora ante la ONU, habían declarado que la salida de al Asad del poder no estaba entre las "prioridades" de Washington.
Se sabe que la televisión estatal de Siria calificó como "agresión" la decisión del gobierno de Estados Unidos.