LO DIJO TODO. El exministro del Interior Carlos Morán reveló que la presidenta Dina Boluarte lanzó de manera indirecta un ultimátum al coronel PNP Harvey Colchado, exjefe de la Dirección de Investigación de Delitos de Alta Complejidad (Diviac), para que se allanara y se archivaran las investigaciones en contra de su hermano Nicanor Boluarte.
Morán indicó que fue citado por Mateo Castañeda, abogado de la mandataria, a su despacho el pasado 25 de marzo. Allí le indicó que le presentaría a una “persona importante”.
“Espero en una sala pequeña y me indica en ese momento que la reunión iba a ser con la presidenta de la república. Inmediatamente llamo al coronel Colchado, intuía de qué iba a tratarse esa reunión y le pongo en advertencia, que esté atento”, expresó el extitular del Mininter.
“A los pocos minutos hubo la reunión y encuentro a la presidenta de la república, al doctor Mateo Castañeda y a Nicanor Boluarte. No la conocía, era la primera vez que la veía a ella y a su hermano”, agregó en declaraciones a la prensa.
Morán remarcó que la reunión fue “tensa” y que Dina Boluarte “en forma altisonante” le dijo que desconfiaba de la labor de Harvey Colchado por las investigaciones contra su hermano y también de la prensa.
“La presidenta comenzó a argumentar que lo que pasaba con su hermano era una situación abusiva, que era injusto y que el caso debería ser archivado. Yo le dije que toda investigación tiene un inicio y un fin, y en su momento se resuelve por la fiscal”, acotó.
El exministro detalló que en ese momento se comunicó con Colchado y lo puso en altavoz para indagar por el caso. El coronel negó cualquier animadversión contra la presidenta y su familia.
“Le pregunté en ese momento por el caso del hermano de la presidenta, Nicanor Boluarte, ¿cómo estaba? Me dijo: ‘no hay nada concreto, debería archivarse en tres meses, claro con la opinión final del fiscal que está a cargo del caso’”, narró.
“El mensaje era claro, era un ultimátum para el coronel Colchado para que pueda allanarse y pueda favorecer en esa investigación directamente”, añadió.
Carlos Morán también brindó detalles sobre una tercera reunión, el 30 de abril, en el Centro Aeronáutico de la avenida Javier Prado. Allí participaron Mateo Castañeda y el coronel Harvey Colchado, donde se habló de un “intercambio de figuritas”.
En ese sentido, refirió que Castañeda le planteó buscar información contra el fiscal de la Nación interino, Juan Carlos Villena, y el fiscal supremo Hernán Mendoza -a cargo de la investigación por el caso Rolex- a cambio de no pasarlo al retiro en diciembre próximo.
“La figurita suya es que le había dicho a la presidenta de que el enemigo no es el coronel Colchado, sino el 1 de la fiscalía –se refería al doctor (Juan Carlos) Villena- y el fiscal supremo Mendoza, a cargo de la investigación del caso Rolex, y le proponía buscar alguna irregularidad de estos funcionarios públicos. La otra figurita de él es que en diciembre se producen los pases al retiro normalmente en la Policía Nacional. A buen entendedor, pocas palabras”, narró.
“Cuando termina la reunión, me quedo con el coronel Colchado y le digo: ‘estás con investigaciones disciplinarias, encima esta propuesta evidentemente ilegal’, y él me dijo que no me preocupara, que actuaría de acuerdo a ley. Ahora entiendo por qué, estaba actuando en su rol de agente encubierto. Esa fue la última reunión que tuvimos”, recordó.
Finalmente, Carlos Morán negó cualquier emboscada o complot contra Mateo Castañeda. También desmintió ser el agente encubierto porque dicho papel lo cumplía el coronel Harvey Colchado.
“He salido a declarar porque me han achacado que he participado en una emboscada, un complot. Eso lo descarto enfáticamente. Mi participación ha sido de acuerdo a principios de buena fe y confianza. He presentado al doctor Mateo Castañeda, mi abogado, con un coronel que quería conocer, al señor Colchado, al que conozco desde hace 25 años”, sentenció.
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