Por: Miguel Ramírez / Periodista de investigación
Cuando era presidente regional de San Martín al excongresista César Villanueva le decían ‘El brujo’. En el momento que cualquier conflicto estaba por estallar se aparecía en las reuniones sin avisar y escuchaba en silencio. Luego, como por arte de magia, encontraba la solución. Todos salían contentos.
Dicha habilidad, sin embargo, parece que no le servirá de mucho luego del misil que le lanzó Jorge Barata. El exmandamás de Odebrecht dijo que se le pagó un soborno de US$60 mil, por la carretera de San José de Sisa, cuando fue gobernador (2007-2013).
Barata hasta reveló que el apelativo de Villanueva era ‘Currículum Vita’. Confesó que el monto se entregó a pedido de Eleuberto Martorelli, quien era el director de inversiones en el Perú de la empresa corrupta. Villanueva admitió su amistad con Martorelli.
La relación entre Villanueva y Barata ya era conocida. El año 2011 fue presidente de la Asociación Amazónica de Fomento de la Inversión Privada. El vocal de esa organización era Barata. Ni más ni menos. Incluso, su hijo también trabajó para esa compañía.
Lo revelado por Barata le ha reventado en el rostro a Villanueva y desbaratado la imagen que quería dar de abanderado de la lucha contra la corrupción. ‘El brujo’ fue el principal gestor de la vacancia del expresidente Pedro Pablo Kuczynski, a quien acusó de corrupto y de haber recibido coimas de Odebrecht, cosa que hasta hoy no se ha probado.
“Lo que ha ocurrido con el presidente Kuczynski es que varias veces no ha dicho la verdad, ha dicho que no conoce a Odebrecht, pero sí conoce a Odebrecht”, decía Villanueva cuando -junto con los fujimoristas y apristas- maquinaba la caída de PPK, que ocurrió en marzo del 2018.
El entonces embajador de Perú en Canadá y hoy presidente, Martín Vizcarra, también formó parte de ese plan en la sombra. Tanto así que, cuando asumió la presidencia, nombró a Villanueva como su primer ministro.
Una pregunta clave que surge después de la revelación de Barata es ¿por qué Villanueva acusaba a PPK de corrupto cuando –según lo declarado por Barata– él había recibido una coima?
Tal vez, dicen algunos, porque Odebrecht le aseguró que nunca revelaría ese secreto, a cambio de tumbarse a PPK y crear un caos político. No hay que olvidar que fue Odebrecht la que filtró al Congreso los contratos que hizo la empresa de PPK cuando la administraba su socio, el chileno Gerardo Sepúlveda.
“Niego tajantemente haber recibido un solo centavo de este señor (Barata) o de cualquier persona ligada a la empresa Odebrecht”, respondió Villanueva. También renunció a su inmunidad parlamentaria, a sabiendas que no lo puede hacer.
‘El brujo’ tiene mucho que explicarle al país. Sobre todo por qué impulsó la vacancia de PPK. Su supuesta lucha contra la corrupción parece haber sido un cuentazo.
Nos vemos el otro martes.
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