El 19 de febrero de 2024 fue un día que cambió por completo la vida de un empleado de la empresa de seguridad Prosegur. El trágico incidente ocurrido en la sede principal del Banco de la Nación, en San Borja, tuvo un impacto significativo en el destino de Marcel Héctor del Carpio Salas y su familia.
Latina Noticias revela cómo lo que parecía ser un día laboral como cualquier otro se transformó rápidamente en una tragedia, evidenciando la falta de preparación para emergencias en una de las instituciones bancarias más relevantes del país.
A las 6:53 de la mañana, una cámara de seguridad en la oficina de control de Seguridad de la sede central del banco capturó el comienzo de los eventos que culminarían en la muerte de Marcel Héctor del Carpio Salas.
Las imágenes muestran a Marcel ingresando a su oficina en el sótano 1 del banco, aparentemente buscando ayuda antes de desmayarse en su escritorio, apenas seis segundos después de sentarse.
Su compañero de trabajo intentó asistirlo, pero la situación empeoró cuando Marcel perdió el conocimiento nuevamente. Dos agentes de seguridad llegaron al lugar, pero la falta de coordinación y la ausencia de un protocolo de emergencia dejaron claro que el personal no estaba preparado para manejar crisis de salud.
Expertos consultados durante la investigación señalaron que en situaciones críticas como esta, cada segundo es crucial. Sin embargo, pasaron más de diez minutos antes de que alguien intentara reanimarlo. Durante ese tiempo, Marcel yacía en el suelo sin recibir la atención médica necesaria que podría haberle salvado la vida.
El supervisor del centro de control, Jean Carlo Lazo Salcedo, un empleado del Banco de la Nación, había llegado a su oficina y verificaba que todo estuviera siendo grabado por las cámaras de seguridad.
Después de 23 minutos de agonía, Marcel finalmente fue trasladado al hospital, pero no en una ambulancia, sino en el vehículo de un empleado del banco, según confirmó el área de Comunicaciones del Banco de la Nación. Para entonces, ya era demasiado tarde. Cinco días después, Marcel falleció debido a complicaciones cerebrales originadas durante el incidente.
El comunicado emitido por el Banco de la Nación, enviado a Latina Noticias, contradecía los hechos registrados por las cámaras de seguridad. A pesar de ello, era evidente que la falta de una respuesta rápida y eficaz por parte del personal del banco contribuyó a que la situación se deteriorara.
La familia de Marcel optó por no hacer declaraciones públicas, pero la existencia del video de seguridad plantea interrogantes sobre las responsabilidades y la necesidad de implementar protocolos de emergencia efectivos en todas las instituciones para evitar tragedias como esta en el futuro.
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