LAS OBLIGABAN A PROSTITUIRSE. En medio de un operativo en el conocido local Sirenitas VIP, en Los Olivos, el Ministerio Público rescató a 56 mujeres, que serían víctimas de trata de personas, y detuvo a los encargados del establecimiento, quienes son investigados por el presunto delito de favorecimiento a la prostitución.
La Fiscalía Especializada en Delitos de Trata de Personas de Lima Norte fue responsable de la intervención. El fiscal provincial Luis Alberto Sánchez Villarán informó que vienen desplegando las diligencias urgentes e inaplazables para esclarecer los hechos.
El objetivo es definir la situación jurídica de R.A.L.P., una joven de 20 años que se desempañaba como cajera; A.A.B.S. (22), encargado de barra; y de V.H.B.H. (28), presunto guardia de seguridad a quien se encontró en posesión de un arma de fuego y se investigará si disponía de un permiso para portarla.
La Fiscalía precisó que al interior del inmueble, que pertenece a la Empresa Inversiones Yawi E.I.R.L, se halló a 56 mujeres, de las cuales 40 son de nacionalidad ecuatoriana, 9 peruana y 7 venezolana.
Además, identificaron a 75 ciudadanos (clientes), quienes habrían solicitado servicios sexuales.
ASÍ OPERAN ESTAS MAFIAS
Según los datos más recientes, hasta julio de este año, las cifras de mujeres que son obligadas, bajo amenazas, para ejercer el trabajo sexual superaban las 1000 personas.
El general PNP Carlos Malaver Odias, jefe de la Dirección contra la Trata de Personas y Tráfico Ilícito de Migrantes (Dirctptim), explicó cómo las bandas criminales captan a sus víctimas.
Malaver detalló que se enfocan en adolescentes y mujeres con una edad máxima de 25 años. Asimismo, captan a ciudadanas extranjeras con el cuento del “trabajo seguro” e incluso son traídas desde el exterior.
60% de las mujeres son venezolanas, mientras un 10% son colombianas y ecuatorianas. El resto corresponde a peruanas del interior del país, que son traídas con engaños.
“Los tratantes prometen un trabajo formal y estable en Lima, incluso les ofrecen solventar su desplazamiento, que tiene un costo, aproximadamente, entre 15 mil a 20 mil soles, si vienen del extranjero”, contó a Andina.
En otras ocasiones, enamoran a sus víctimas para tener su confianza a través de las redes sociales. De esta manera, consiguen que viajen hasta Lima y se hospeden en una vivienda con otras mujeres.
Sin embargo, antes de ello, le quitan todo tipo de documentación que no les permite identificarlas y las tienen bajo amenaza si no cumplen con lo ordenado. Estos sujetos obtienen ganancias ante los trabajos sexuales, los cuales exponen a las féminas en locales informales que funcionan en zonas clandestinas.
El general PNP manifestó que las féminas son violentadas de manera psicológica y física, debido a que les revisan sus celulares para vigilar con quiénes tienen contacto. E incluso cuando denuncian estos casos pueden atentar contra su vida.