FRÍO Y CALCULADOR. La Policía cree que Joshua Huamán Jerez, conocido como el ‘Monstruo de Cieneguilla’ y responsable del brutal asesinato de la enfermera Kimberlit Tapia Ortiz, podría estar relacionado con otros crímenes, tras analizar su perfil sicológico y luego de que apareciera una nueva denuncia en su contra, por lo que podría tratarse de un asesino serial.
Una mujer, quien prefirió no revelar su identidad, contó que, en mayo de 2022, también fue víctima de Joshua Huamán. El sujeto se ganó su confianza y visitó su departamento con la excusa que iba a entregarle un regalo.
El hombre le tapó los ojos a la mujer y cuando se distrajo le golpeó la cabeza con un bate de béisbol. Por fortuna, la fémina reaccionó rápidamente al ataque y con la poca estabilidad que le quedaba sacó al ‘Monstruo de Cieneguilla’ de su casa.
La trabajadora conoció al individuo en el colegio y varios años después retomaron comunicación. Las conversaciones se intensificaron, al punto que Joshua Huamán intentó tener una relación con ella.
“Me dijo ‘A mí no me vas a engañar’ y me quitó el celular. Se fue a la cocina, yo lo sigo y empieza a guardar su cinta y el bate de beisbol en su mochila. Era muy intenso, quería que le comparta mi ubicación, me hacía videollamadas”, señaló la mujer a Domingo al Día.
Con este nuevo testimonio, los investigadores están construyendo una hipótesis que apunta a la posibilidad de que el Monstruo de Cieneguilla haya cometido otros crímenes, lo que lo colocaría en la categoría de asesino en serie.
El confeso criminal ha sido descrito por la Policía como una personalidad manipuladora, carente de empatía, con impulsos violentos recurrentes y una marcada necesidad de control sobre sus víctimas, especialmente su pareja. Este perfil encaja con el brutal asesinato de la enfermera Kimberlit Tapia.
El 8 de septiembre, Kimberlit fue vista por última vez siguiendo a Huamán hacia el condominio Renacer, donde alquilaron un bungalow por el que pagaron 1900 soles por tres días y dos noches.
En su mochila, Joshua llevaba los cuchillos con los que acabaría con la vida de la joven. Durante el interrogatorio, Huamán declaró que estaba “obligado” a cometer el crimen, afirmando que alguien lo instigó a matar a Kimberlit cortándole el cuello.
La actitud de Huamán durante su declaración ha generado serias dudas. Llorando y pidiendo perdón en algunas ocasiones, también intentó desviar la responsabilidad hacia un supuesto hombre alto, rubio y corpulento que conoció en un juego en línea, asegurando que este le ordenó cometer el crimen y deshacerse del cuerpo.
Contenido GEC