
Un nuevo incendio devastó el mercado Nueva Esperanza, en el distrito de Villa María del Triunfo, dejando al menos 20 puestos calcinados. Según testigos y comerciantes, el siniestro no habría sido un accidente, sino un ataque planificado por una organización criminal dedicada a la extorsión.
Las llamas comenzaron repentinamente y avanzaron con rapidez, arrasando con los negocios de decenas de emprendedores que no lograron salvar ni un solo producto. Los bomberos acudieron de inmediato, pero el fuego ya había causado daños irreparables.
Todo apunta a que se trata de una represalia contra los vendedores por negarse a pagar las elevadas cuotas que exige una banda que, desde finales de 2024, cobra hasta S/ 70.000 por ingresar a la asociación de comerciantes y S/ 70 semanales por cada puesto.

“¿DE DÓNDE VAMOS A PAGAR?"
Los comerciantes están indignados. “Esto ha sido por culpa de esos delincuentes. Desde el año pasado nos piden 70.000 soles para trabajar, pero no tenemos cómo pagar eso. Apenas si nos alcanza para comer”, dijo uno de los afectados. Otros testimonios coinciden: aseguran que el incendio fue causado por un sujeto vinculado a los extorsionadores.
Una de las damnificadas, Amalia Valle, de 58 años, perdió entre S/ 20.000 y S/ 30.000 en mercadería. “Tendré que buscar otro lugar para vender. Todo lo he perdido”, contó con lágrimas. Además, negó rotundamente la versión de que el incendio empezó en su puesto, como señaló inicialmente la policía.
“No hay clientes. La gente ya no viene por miedo. Por eso no hay dinero, ni siquiera para pagar lo que nos exigen”, añadió otra vendedora.

SEGUNDO ATAQUE
Este nuevo atentado no es un caso aislado. En febrero de 2025, otro incendio similar arrasó con 14 puestos en un pasaje cercano. En esa ocasión, los comerciantes también señalaron a la misma organización como responsable. Desde entonces, muchos vendedores y hasta mototaxistas han optado por retirarse del mercado por temor.
“Desde noviembre o diciembre del año pasado, la extorsión se puso fuerte. Empezaron con el mercado y luego fueron por los ambulantes. Ya nadie está seguro aquí”, relató un vecino en declaraciones a RPP.

Otro habitante del lugar añadió: “Gracias a Dios el fuego no llegó a toda la zona, porque si no, el mercado entero desaparecía”.
La situación es tan grave que incluso los vecinos temen por la seguridad de los niños de una institución inicial ubicada a pocas cuadras del mercado incendiado.
La Policía Nacional continúa con las investigaciones, mientras los comerciantes exigen protección urgente y la captura de los responsables. La angustia crece en Villa María del Triunfo, donde el miedo a los extorsionadores ya cambió la vida de toda una comunidad.