Solo le espera una vida tras los barrotes. El estudiante de veterinaria Giancarlo Sánchez Suárez (25), quien confesó ser el autor del espeluznante asesinato y descuartizamiento del taxista Gerber Coz Vara (36), recibió ayer siete meses de prisión preventiva. Dijo que perpetró el crimen por celos y ‘porque me usaba mucho, porque mareado me insultaba’.
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La decisión fue tomada por la jueza Janet Ibánez, de la Corte de Lima Este, tras considerar que existen graves y fundados elementos sobre el llamado ‘Monstruo de San Juan de Miraflores’, quien presenta peligro de fuga.
El pedido de encarcelamiento lo sustentó el fiscal Leonardo Lozano por el delito de homicidio calificado.
La defensa del acusado solo se limitó a resaltar que ‘mi patrocinado ha colaborado con la Policía’ y solicitó en la audiencia ‘una terminación anticipada del proceso’.
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“Pido disculpas y acepto el error que he cometido. Acepto pagar la condena que me pongan más adelante y quiero dejar claro que estoy muy arrepentido”, expresó Sánchez a la magistrada.
Según las indagaciones, el joven planificó el espeluznante asesinato, luego de descubrir en el celular de Coz Vara una foto en la que aparece con una mujer y de enterarse que quería alejarse de él por completo.
Sánchez, en sus primeras declaraciones a la Policía, contó que lo invitó a su casa, en San Juan de Miraflores, donde le dio una cerveza con somníferos y luego ‘le puse una inyección para caballos’.
“Lo maté, lo descuarticé y paseé tres días con los restos en la camioneta (de la víctima) hasta que los arrojé en Cieneguilla (y les prendió fuego)”, relató a la Policía. La cabeza la enterró en su casa.
El abogado penalista Mario Amoretti aseguró que el asesino recibiría 35 años de cárcel. “Ha actuado con crueldad, es un homicidio calificado con alevosía pues se aprovechó de la confianza de la víctima para no solo matarla, sino también para descuartizarla. Todo ha estado planeado. La sanción que recibiría es de 35 años, como ha pasado en otros casos”, dijo a Trome.
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